Así es la nueva casa de Julio Iglesias: está en Galicia y era propiedad de un alcalde

De Un canto a Galicia, uno de sus temas más emblemáticos, a tener una casa (toda una señora casa) en Galicia. Julio Iglesias, recuperándose de los problemas en una pierna que le han ocasionado una gran pérdida de la movilidad, busca refugio en la tierra de sus mayores. Del Caribe, entre Santo Domingo y Miami al frescor de las fragas tierra adentro, en Piñor, provincia de Orense. El cantante tiene otra casa en España, en Marbella.

En Piñor, una localidad de poco más de mil habitantes se ha conocido la compra del cantante que no ha visitado aún su nueva propiedad. Iglesias lo ha admitido esta semana en su revista de cabecera, ¡Hola!. "Quiero campo", es su resumen del deseo de tener una casa en España y ha adquirido una imponente casa solariega, Santa Lucía. Una mansión para tener un destino gallego con su esposa, Miranda, y sus hijos y nietos.

La finca Santa Lucía consta de una mansión de 1.340 metros cuadrados, erigida en estilo tradicional gallego, enclavada en un entorno natural y rodeada de un rústico muro de piedra que le permita mucha intimidad a sus inquilinos.

La finca luce un lago artificial, que le aporta un paisaje idílico junto a una gran piscina al aire libre y amplios jardines de especies autóctonas. El edificio cuenta con ascensor en su interior y un garaje con capacidad para una veintena de vehículos. Como corresponde a una finca gallega, tiene un amplio hórreo y además del edificio principal está disponible otra gran casa para invitados y personal.

La mansión no tiene un precio loco a tenor de los precios que se estilan en los centros de Madrid, Málaga, Sevilla o Barcelona. El precio habrá rondado los 4 millones de euros, una cantidad razonable para la magnitud de la propiedad.

Esta finca Santa Lucía pertenecía anteriormente a Manuel Cabezas, ex alcalde de Orense, y su esposa, Ada Arroyo. Este ex regidor orensano contaba en Piñor con una de las mansiones más llamativas de toda Galicia y que ha estado cerrada durante meses mientras se negociaba con Julio Iglesias, que la habría adquirido entre marzo y abril.

Julio Iglesias tiene 81 años y lleva seis años sin pisar los escenarios, entre especulaciones de una delicada salud. Su deseo de regresar a España al menos para pasar temporadas le llena de ilusión para estar junto a su mujer, Miranda Rijnsburger, y todos los familiares que quieran acercarse. Por ejemplo mantiene una excelente relación con su primera esposa, Isabel Preysler, que a buen seguro iría a visitarle con frecuencia. Este destino gallego viene a unirle a la memoria de su padre, Julio Iglesias Puga, quien mantuvo una casa en Galicia durante toda su vida.