La Hermandad Matriz hace balance de un Rocío "profundamente vivido, muy participativo y lleno de momentos compartidos en fraternidad"

El Rocío/La Hermandad Matriz de Almonte ha hecho balance de la Romería del Rocío 2025, que concluye con una valoración muy positiva por parte de la institución almonteña, tanto por el desarrollo de los cultos y actos, como por la respuesta masiva de fieles y peregrinos que han vivido este Rocío Grande con especial intensidad, marcado por la celebración del Año Jubilar que celebra la Iglesia.

“Ha sido una romería profundamente vivida, muy participativa y llena de momentos compartidos en fraternidad”, ha expresado el presidente de la Hermandad Matriz, Santiago Padilla, quien ha querido subrayar el carácter excepcional de este Rocío al ser el Santuario templo jubilar de la Diócesis de Huelva en este Jubileo: “La presencia del mensaje del Papa León XIV, la Misa de Pentecostés en el paseo marismeño o la ampliación del recorrido de la procesión de la Virgen han sido hitos que nos dejan una Romería para el recuerdo”.

Entre los momentos más destacados, la Pontifical de Pentecostés reunió a la familia rociera en el paseo marismeño, en un nuevo enclave para esta cita destacada que ofreció una imagen imponente de la devoción rociera, con la marisma de Doñana repleta de agua como telón de fondo. La eucaristía fue presidida por el Obispo de Huelva, D. Santiago Gómez Sierra, y contó con la participación de los simpecados de las 127 hermandades filiales y, de manera excepcional por el Jubileo, también con los de las 22 hermandades agregadas.

El altar ha subrayado el significado de este Año Jubilar, con la reproducción de la capilla de la Anunciación, de la Iglesia Nacional Española en Roma, donde se encuentra durante todo este tiempo el simpecado verde de la Matriz. La celebración fue cantada por el Coro de la Hermandad del Rocío de Málaga y contó con la presencia de representantes de las hermandades de las Vírgenes Coronadas de la Diócesis onubense.

Durante la misa, se dio lectura a una carta del Papa León XIV, que trasladó su cercanía espiritual a todos los rocieros y peregrinos, alentándolos a “dejarse transformar por la acción del Espíritu Santo para ser testigos valientes del Evangelio y servidores alegres de los más necesitados”. Asimismo, el Pontífice invocó la protección de la Virgen del Rocío y les impartió la bendición apostólica.

El momento más esperado, la procesión de la Patrona de Almonte, comenzó a las 02:42 horas de la madrugada del Lunes de Pentecostés y concluyó a las 12:32 horas del mediodía, con un recorrido que se prolongó durante más de nueve horas. Este año, se ampliaba unos metros el recorrido a la altura de la Plaza de Doñana, lo que permitió una mejor distribución de los simpecados y facilitó la fluidez y el desarrollo de la procesión de la Virgen, llevada a hombros por los almonteños.

La Romería también ha contado en la segunda jornada de la Presentación de Hermandades del sábado, uno de los actos más emblemáticos del fin de semana, con la presencia del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, quien quiso acompañar a la Hermandad Matriz y las filiales en esta cita. Destacando que El Rocío es una “gran referencia mundial de la marca Andalucía y una de las celebraciones más importantes de Europa".

Desde la Hermandad Matriz se ha querido destacar el trabajo de coordinación llevado a cabo por los servicios del Plan Romero, agradeciendo expresamente la implicación de todas las administraciones públicas, cuerpos de seguridad, efectivos sanitarios y hermanos colaboradores, cuyo compromiso ha sido clave para que todo transcurriera con normalidad.

La Hermandad Matriz regresó este martes, siendo la última en abandonar la aldea. El simpecado volvió a la Parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción, acompañado por la comitiva de la Hermana Mayor de esta Romería, Isabel María Díaz, al filo de las 23:00, con los sones de la escuela de tamborileros y la Banda Municipal de Música, entre vivas y el cariño de todos los vecinos que se acercaron hasta la Plaza Virgen del Rocío para despedir así un Rocío que en el pueblo de la Virgen dura todo año.