La hermandad de Cádiz llegó en la tarde de ayer a la aldea del Rocío

Cádiz

El camino ha sido especialmente duro para los romeros debido a la lluvia y al frío de estos días

La carreta con el Simpecado, cubierta con plásticos, entrando en la capilla de la casa de hermandad en El Rocío.
La carreta con el Simpecado, cubierta con plásticos, entrando en la capilla de la casa de hermandad en El Rocío.

El Simpecado del Rocío de Cádiz se encuentra ya en su capilla de la casa de hermandad en la aldea almonteña a la que llegaron los romeros que el martes iniciaron el camino y que desde entonces han venido cruzando el espacio natural de Doñana del que salieron ayer pasadas las dos de la tarde.

El hermano mayor de la hermandad, Francisco Ghersi, declaró a la llegada que el camino había sido especialmente duro por el frío de las noches, "lo que no se producía desde hace años", alternado también con la lluvia, especialmente en el día de ayer, por lo que la carreta del Simpecado fue cubierta con plásticos.

Ayer ya se inició la recepción de las hermandad filiales, por orden inverso de antigüedad, correspondiendo esta tarde a la de Cádiz, la número 59 de entre las 112 actuales, y también a las doce de la noche se celebrará el denominado rosario de Almonte.

Mañana, a las diez de la mañana, el obispo de Huelva, monseñor José Vilaplana Blasco, concelebrará la Eucaristía de Pentecostés con los capellanes de las hermandades filiales, y a las doce de la noche el Simpecado de la hermandad matriz de Almonte presidirá un nuevo un rosario por las calles de la aldea a cuya conclusión comenzará la espera para que la Virgen del Rocío salga en procesión, a hombros de los almonteños, el momento más ansiado de la Romería.

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