el rocío de siempre

De la calle del Berdigón al Rocío

  • El dibujo 'La salida del Rocío' de José Caballero traslada a los orígenes de la hermandad Era el lugar de la partida, que se realizaba por la noche entre arcos de flores y bailes

LA salida es fiesta y jolgorio. El camino empieza en la misma ciudad que despide a los romeros. La mirada al Rocío la han tenido todos, desde todos los ángulos, pocos o ninguno se han podido abstraer al color, la fiesta y la fe. José Caballero también ofrece una pincelada importante de la Hermandad de Huelva, lo hace en Cuadernos de Huelva, que edita la Diputación Provincial de Huelva y hoy rescatamos para este Jueves de Rocío, cuando se celebra el Año Caballero.

El dibujo es clave, para formar parte de esas otras pinceladas de ese Rocío de siempre e histórico que guardan las paredes de la hermandad. Aquellos hablan del camino entre pinares o la Venta la Pava.

Caballero muestra la comitiva en un lugar especial y quizás olvidado en lo que significó para el nacimiento de la hermandad y la vida de esta en sus primeros año desde finales del siglo XIX. La comitiva se adentra a la calle del Berdigón, como así se le llamaba en 1880 cuando funda. Es muy descriptiva. Todo el movimiento y trasmite la alegría que en tinta queda sobre el papel en blanco. Hay también un guiño a calle San Francisco dejando ver el nomenclator.

La comitiva se adentra por la calle del Berdigón, o la llamada también calle Sevilla que conectaba a la carretera hacia la ciudad hispalense por la Cuesta de San Cristóbal. Aquí es donde surge la hermandad rociera, con vecinos de la misma como Francisco Carrasco Ortiz 'El Polaco', que vivía en la calle Sevilla, 14, o Rafael Colombo con la panadería de su nombre un poco más abajo, entre otros muchos que también se reunían en la calle Enmedio, pero será la del Berdigón la que tomará protagonismo por ser el eje hacia El Rocío. Aquí es donde tendrán lugar las primeras verbenas como antesalas de la partida. Esas fiestas que luego se extenderán por otros puntos de la ciudad, como La Placeta, la calle Puerto, la Plaza de la Merced e incluso la Plaza de las Monjas.

Ese Rocío de 1880 arranca aquí en la llamada calle del Berdigón. El periódico La Provincia que acaba de nacer en ese año y le va a dedicar sus primeras cuatro líneas: "Anoche con motivo de la salida de los romeros para El Rocío estuvo muy animado el barrio Sudeste. Hubo allí música, fogatas, cohetes, bailes, etc.".

Sí, la comitiva partía al anochecer a diferencia de cómo la entendemos hoy, pero con el mismo ambiente coronando al Simpecado con arcos de flores en esta misma calle. Ese es el mismo mes en el que el Ayuntamiento de Almonte le da carácter oficial a la peregrinación que desde años antes venían haciendo los devotos de la Virgen del Rocío para su romería.

El dibujo de Caballero, titulado La salida del Rocío, recrea aquellas partidas hacia la romería, con la antigua carreta con un diseño especialmente original que remataba la corona real. La carreta que se estrenó en 1919. Se dispone a recorre la calle Berdigón, que se mantendrá en el tiempo como punto clave en la despedida, y es que aunque la verbena se hiciera en distintos barrios, dependiendo del lugar de la vivienda del hermano mayor, esta calle mantenía sus fiestas y era donde se despedía a los romeros de la ciudad, luego vendría El Punto y la Cuesta de San Cristóbal.

Rafael Colombo recordaba para Francisco Montero Escalera en Odiel aquellos rocíos de los que viviera con su padre en los primeros años: "Huelva despedía a la Virgen con arcos de flores que daban frescor y sombra a la calle Berdigón y la alumbraba en su marcha con luces de velones". Sin olvidar ese otro año que el impulso de la devoción les llevó a un grupo de rocieros a no dejar que la hermandad se quedara en Huelva sin la romería porque nadie se hacía cargo de ella y se perdería su historia y su lugar en la romería. No fue así.

Ahora se habla en la Hermandad del Rocío de volver a estos lugares históricos. Este año en su salida de la parroquia de la Concepción, a la que visitaron por los quinientos años, se bordeó estas calles históricas. Pero sería muy acertado, como ya se apunta, volver a este espacio que tiene su eje en la iglesia de San Francisco.

Hay imágenes que evocan un tiempo y esta de José Caballero es el de los orígenes de la Hermandad del Rocío de Huelva. Un regalo en el Centenario del pintor onubense que al recordar en los años cincuenta la ciudad de su juventud recreó la salida de los rocieros de Huelva.

más noticias de EL ROCÍO Ir a la sección El Rocío »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios