La Hermandad del Rocío de Córdoba ya camina hacia la aldea bajo la lluvia

El sentimiento rociero ha brotado esta tarde en Córdoba y la hermandad ha puesto rumbo a la aldea almonteña. La fe y la devoción ha podido con una salida pasada por agua en la que los rocieros cordobeses han comenzado un camino de nueve días en los que recorrerán los 200km que le separan de la Blanca Paloma.

Unos 150 peregrinos, diez coches de caballos y 25 carriolas han arropado a la Hermandad en su salida, que afronta a un camino donde se prevé que la lluvia siga presente. La iglesia de San Pablo abrió sus puertas para celebrar la tradicional misa de romeros en la que numerosos rocieros se acercaron para despedir a la ciudad y poner rumbo hasta presentarse ante las plantas de la Virgen del Rocío. Durante su camino está previsto que la caravana vaya creciendo con la incorporación de las hermandades de Moratalaz y Montoro, ahijadas de la filial cordobesa.

En la salida se vivió un ambiente rociero envidiable donde la lluvia quedó en un segundo plano y los cantes por sevillanas al son de panderetas y tambores resonaron en las calles de Córdoba. Un camino que abre la veda del resto de Hermandades que pondrán rumbo a la aldea durante los próximos días. En Huelva, quedan seis días para que la Hermandad del Rocío de Emigrantes comience su camino y una semana,