La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Almería prepara un nuevo caminar hacia la aldea almonteña para celebrar la Romería de 2022. La corporación almeriense, filial número 69 de Almonte, ultima los preparativos finales tras tres años de larga espera con motivo de la pandemia mundial por coronavirus.

Después del pregón que pronunció Antonio Vela, la hermandad celebró el triduo. Por su parte, el próximo 28 de mayo tendrá lugar la misa de romeros. Como novedad, este año la eucaristía será a las 10:00 en su sede canónica. Esta será presidida por su consiliario, Juan Antonio Moya. Tras la misa, que será cantada por el Coro de la Hermandad y que contará con la intervención del tamborilero, saldrá el bendito Simpecado y será entronizado en la carreta. Desde allí visitarán a la Cofradía de la Soledad, en la iglesia de Santiago. También estarán presentes en el santuario de la Santísima Virgen del Mar como despedida de la Madre de todos los almerienses. Acto seguido, desde la misma Plaza de su Patrona, emprenderán la marcha hasta el vecino pueblo de Fiñana, otra de las novedades de este camino. Allí visitarán al Patrón, San Sebastián, y realizarán el almuerzo de convivencia, como antaño, en este rociero pueblo almeriense. Ya por la tarde tomarán camino hacia Guadix para celebrar, como también hacían años atrás, convivencia con los hermanos rocieros de este municipio granadino.

Desde allí, en la mañana del domingo, tomarán rumbo hacia Coria del Río para volver a cruzar en barcaza el Guadalquivir. Otro de los pasos que la Hermandad del Rocío de Almería recupera en este camino de 2022. 

El lunes, como siempre, les espera su querido pueblo de Benacazón. Un municipio que lleva acogiendo el inicio de su camino desde hace más de 30 años. Como es habitual, realizarán la visita a su querida Hermandad del Rocío de Benacazón, a las hermandades de la Soledad y Vera Cruz y a la Patrona de esta localidad sevillana, la Virgen de las Nieves.

El martes 31 de mayo partirá hacia Azanalcázar para llegar, ya por la tarde, al Vado del Quema. El miércoles 1 de junio llegará al querido pueblo de Villamanrique, donde su carreta subirá los siete escalones para visitar a la primera hermandad rociera. Por la tarde-noche llegará a Palacio para disfrutar de la siempre esperada convivencia junto al resto de hermandades rocieras. El jueves 2 de junio sobre las 13:00 la hermandad hará su entrada en la Aldea por el Puente del Ajolí. Desde allí, la carreta seguirá por la calle Ajolí, donde realizará su habitual parada, antes de llegar a su casa de hermandad, en la cual realizará una convivencia con todos los rocieros almerienses.