España se situó en la segunda mitad de 2022 entre los países de Europa cuyos ciudadanos más pagaron por la factura de la luz, pese a medidas como el tope al gas.

Según la Oficina Europea de Estadística, Eurostat, el precio medio para un consumidor (incluyendo tasas e impuestos) fue de 0,3452 euros el el kilovatio hora, lo que implicaría un gasto medio de 100 euros para un hogar tipo.

Esto significa que nuestro país se sitúa en el séptimo puesto de Europa con el recibo más caro, solo superado por Dinamarca, Bélgica, Irlanda, Italia, República Checa y Alemania. El precio es un 21% superior al de la media de la Unión Europea (0,2832 euros el kilovatio hora) y un 17,5% más alto que el de la zona del euro (0,2832 euros).

El coste más alto lo marca Dinamarca, con 0,5370 euros, y el más bajo Kósovo, con 0,0975, aunque dentro de la zona euro el que tiene el precio más barato es Holanda: 0,0694

La razón de que España tenga un recibo medio de la luz más alto que la media de la UE y la Eurozona pese al tope al gas tiene que ver con el hecho de que Eurostat tiene en cuenta todos los tipos de facturas, incluidas las del mercado libre, y no solo las de la tarifa regulada.

El tope al gas ha incidido favorablemente en el mercado mayorista, y, por tanto, en las facturas de la tarifa de último recurso -la regulada- y en las del mercado libre ligadas al precio de la luz.  Pero no en aquellos contratos no vinculados directamente a la evolución de la cotización de la electricidad.

Según Eurostat, el precio medio de la electricidad en España subió en el segundo semestre respecto al primero, cuando estaba en 0,3207 euros el kilovatio hora, y también superior a los 0,2878 del segundo semestre de 2021. En un año, el aumento es del 20%.

Precisamente este mismo jueves el Congreso de los Diputados ha convalidado la prórroga del tope al gas en el cálculo de precios del mercado mayorista. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha afirmado que espera que no sea necesario activarlo y que continúe la actual estabilidad del precios.

El Gobierno afirma que, desde la implantación del mecanismo, los hogares se han ahorrado 5.100 millones de euros, cantidad que el PP rebaja a 1.900. Para los 'populares' el tope al gas sólo ha beneficiado a un 30% de los consumidores, que son los que tiene la tarifa regulada; mientras que un 70% vieron incrementado el coste de junio a diciembre.