En la Sierra de Aracena y Picos de Aroche se localiza un edén del silencio, un pueblo onubense que desde diferentes medios de comunicación señalan como el lugar ideal para desconectar del ajetreo y el ruido de la ciudad, esa que tanto estrés nos genera en el día, y que en este lugar, desaparece.

Se trata también de uno de los doce pueblos más bellos de Andalucía, según el portal de viajes Condé Nast Traveler, "Linares de la Sierra es todo un descubrimiento", señalan desde el mismo. En él viven poco más de 250 habitantes, pero dispone de una preciosa plaza donde buscar los rayos del sol del invierno y algunos restaurantes que, por sí solos, ya son excusa para adentrarse en la serranía onubense. 

Gastronomía de lujo en Arrieros

Uno de los más conocidos es Arrieros, puesto en marcha por Luis Miguel López en una bonita casa solariega. Él se encarga también de la excelente cocina, prestando especial atención a productos locales como la exquisita carne de cerdo ibérico. Este espectacular restaurante bien vale la recomendación de dos guías tan prestigiosas como la Michelín y la Repsol.

En sus hermosos alrededores, destacan también sus "mil y un senderos que unen municipios de la zona tan bonitos como Alájar, Castaño de Robledo, Galaroza o Santa Ana la Real". Incluso la reconocida Guía Repsol lo califican como "un tesoro oculto que bien merece la pena descubrir en la Sierra". 

Y uno de los mejores lugares para disfrutar del silencio mientras relajamos también el cuerpo, además de la mente, son los baños árabes de Linares de la Sierra. Su Hammam ofrece sauna, termas de agua caliente y agua templada, masajes, ducha fría e incluso una ruta del cacao con circuito de agua, masaje exprés con aceite de cacao y envoltura de cacao.

Terma de agua en Linares de la Sierra