Estos días, con el traslado de la Virgen del Rocío a la aldea comienza la cuenta la cuenta atrás para la romería más universal. Tras el parón por la pandemia los devotos de la Blanca Paloma volverán a echarse a los caminos este 2022 para celebrar una de las tradiciones más especiales del calendario festivo onubense.

Volverán a repetirse imágenes que perdurarán por los tiempos como estas, recogidas en 1934 a través de La colección de investigación de imágenes en movimiento (MIRC) de la Universidad de Carolina del Sur (EEUU),  uno de los archivos de acceso abierto más grandes de metraje de películas históricas en los Estados Unidos.

El archivo fue fundado en 1980, cuando Twentieth Century-Fox Film Corporation donó la colección a la universidad. Con más de 23.000 películas de noticieros de 1919-1934 y 1942-1944. Entre ellas, se encuentra un pequeño reportaje de la Romería del Rocío del año 1934.

Concretamente de la procesión de la Santísima Virgen el lunes 21 de mayo, filmadas por el cámara operador William Murray. Estas filmaciones son pequeños recortes para noticieros destinados a los cines estados unidenses. Las ediciones especiales contenían, a veces, temas españoles y fueron muy numerosas en 1934.

No se trataría pues de las primeras imágenes de la romería almonteña, ya que, según se recoge en rocio.com, se conserva en una casa particular de Almonte, una filmación del año 1929.

Esta joya de 1934 grabada por la Fox Movietone New, nos acerca a aquella procesión del lunes de Pentecostés que vino si no a ser un año de estreno.

'Javi el almonteño' cuenta en Rocio.com que en 1933 la familia Cepeda Soldán, en concreto la matriarca, Juana Soldán y Pérez de Rañón, viuda, y sus hijos Ignacio, primer vizconde de La Palma del Condado, y Juan Cepeda y Soldán, fueron los que llevaron a cabo la donación de las andas procesionales que actualmente ostenta la Virgen del Rocío.

Este paso fue estrenado en 1934, junto al dorado que se llevó a cabo al rostrillo de metal de 1919 y las ráfagas redondas de 1733, hasta entonces, venían luciendo su aspecto original plateado. Como curiosidad, las ráfagas estaban colocadas del revés desde el año de la Coronación Canónica, volviendo a su posición correcta, sin duda por intervención y gusto artístico de don Ignacio de Cepeda.

Como curiosidad, se conservan 34 segundos de filmación, en cambio, en la misma ficha técnica de la grabación, aparece una duración de 1:31 minutos. Se desconoce si se trata de un error o de la desaparición total del rollo de película.