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¿Prefieres para este puente la desconexión y la tranquilidad de la playa? Nada como nuestros bellos paraísos de arena blanca y mar salada. El calor del sol del invierno en Huelva es diferente, ¡y lo sabes!
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Os recomendamos estas 6 playas que son un edén para desconectar, de las menos aglomeradas para este Puente de la Constitución en Huelva.
La Antilla es una de las playas más aclamadas en verano, que en invierno es un auténtico paraíso de la tranquilidad.
Además de contar con una amplia restauración que permanecerá abierta durante el puente, pasear por sus arenas es un placer que se puede prolongar hasta su zona más virgen, la playa de Santa Pura y, para los que quieran andar de verdad, la de Nueva Umbría.
La playa de Rompeculos es una de las favoritas para los amantes de la naturaleza. Ubicada entre el Poblado Forestal de Mazagón, el Parador de este enclave y el Camping Doñana, sorprende a todos aquellos que la visitan.
Para llegar a este singular rincón, en el corazón del Parque Natural de Doñana, el visitante puede acceder desde Huelva o Sevilla por la A-494. A pie de carretera, tras atravesar el carril bici que une los núcleos costeros de Mazagón con Matalascañas, existe un gran aparcamiento, de pago. Desde aquí, a través de una gran pasarela de madera, rodeada de una vegetación de zarzas y romero, con grandes y esbeltos pinares, se baja hasta llegar, por fin, al Litoral Atlántico.
Junto a la desembocadura del Guadiana y con vistas a Portugal, la principal playa de Ayamonte ha sabido desarrollar una atractiva oferta turística hotelera con un marcado acento extranjero sin perder la esencia de sus cálidas arenas. Sus más de cinco kilómetros de extensión la convierten en un lujo en el que alternan núcleo residenciales con zonas despobladas y donde se practican deportes náuticos.
Entre las aguas de Lepe e Isla Cristina emerge el núcleo turístico de Islantilla, un enclave galardonado con los principales distintivos nacionales e internacionales de calidad (Q de Calidad Turística, Bandera Azul y Bandera EcoPlayas, entre otros), y que ofrece la mayor oferta de alojamiento de cuatro estrellas de toda la Costa onubense. Con un hermoso paseo marítimo, un prestigioso campo de golf de 27 hoyos, tres centros comerciales, dos escuelas de vela y toda clase de oferta deportiva y de ocio, Islantilla cuenta además con atractivos singulares como su famosa tirolina urbana, la de más largo recorrido de toda Europa.
Un extenso arenal fino y dorado como fachada atlántica al otro lado de la desembocadura del Odiel. Antes que los núcleos costeros que escoltan La Bota, El Cruce o simplemente la playa fue testigo centenario del embate de las olas contra el litoral onubense. Esas mismas olas llevaron hace 74 años el cadáver de William Martin hasta la mesa de operaciones del Estado Mayor de Hitler. El hombre que nunca existió apareció allí para cambiar la historia. Uno de esos guiños del destino que puso a Huelva a través del mar en el camino de la humanidad.
La Bota es lugar de baño y de paseos porque el paraje invita a olvidarse entre el verde.
Es una de las playas más impresionantes del sur de Europa y debe su nombre al río que llega hasta ella, pues su denominación original era Torre del Río de Oro.
Tan preciada era el agua dulce para la zona que se hizo imprescindible defenderla y de ahí la construcción de la torre, un proyecto enmarcado dentro de un plan de Felipe II que abarcaba toda la costa desde Faro hasta Tarifa. La visita de los piratas era bien frecuente y uno de sus pasatiempos favoritos era el de secuestrar a pescadores y saquear la zona. Para parar estas atrocidades se hace necesaria la vigilancia desde un lugar alto: la Torre del Loro.
La playa de la Torre del Loro es una playa semi virgen de una gran belleza. Forma parte de la costa del Parque Natural de Doñana, ese extenso arenal paradisíaco que tenemos aquí en Huelva a escasos 20 minutos del asfalto. Como curiosidad, sus tres kilómetros de longitud abarcan cuatro términos municipales: Palos de la Frontera, Moguer, Lucena del Puerto y Almonte.