Rafael Pérez, el vecino de Moguer que triunfa a nivel mundial haciendo máquinas de gimnasio por encargo: "Funciono con el boca a boca"

Huelva/"Quería hacer algo diferente" y durante la pandemia surgió la ocasión. Rafael Pérez Barroso es un moguereño, que hace ya casi 20 años, aprendió el oficio gracias a su padre, quien dedica su vida a la carpintería metálica. Fue ahí donde encontró una nueva oportunidad y a día de hoy vive de ello.

El gimnasio le brindó inspiración para cambiar de rumbo. "Llevaba 10 o 11 años en el gimnasio y cuando nos encerraron digo... me muero" y empezó a "fabricar una barrita de dominada para mí". Ese fue solo el principio y ahí nació RPFitness.

A partir de ese momento, "un amigo mío me pidió que le hiciera otra", cuenta a Huelva Información. De ahí a redes sociales y "me encargaron tres". Sin darse cuenta, cambió la manera de ver su trabajo, a la vez que ayudó de manera desinteresada a muchas personas que en esos momentos vivían una situación complicada y que buscaban una vía de escape en el deporte. Como le sucedió a él.

Rafa dice que anunció sus trabajos en una página de venta, lo hizo "un sábado por la tarde y el domingo tenía tres mensajes y ya hasta el día de hoy". Apasionado del deporte y de su trabajo con el que con mucho mimo realiza máquinas de gimnasio a medidas y da un acabado impoluto. Más de "40 pedidos", reconoce, de clientes particulares o encargos para gimnasios completos, como es el caso de uno de Málaga.

La prestigiosa Universidad Camilo José Cela, también ha puesto el ojo en sus productos. Un gran trabajo que ha enviado hace tan solo unos días hacia la Comunidad de Madrid. El camino "ha sido duro y lo sigue siendo porque es muy sacrificado y son muchas horas", asegura. Pasa los días en la nave, que comparte con su padre, "desde las 06:30 a las 22:00".

Va aprendiendo cada día algo nuevo, eso es lo que le llevó a continuar con esta nueva andadura, con el nuevo enfoque que le había dado a su faena. "Me gustó la manera de fabricarlo y a día de hoy, pues, voy funcionando con el boca a boca porque no me anuncio en ningún lado". No es necesario porque su buen hacer provoca que sus clientes y conocidos vayan promocionando la labor que Rafa lleva a cabo en su nave.

"La gente está contenta porque lo fabrico bien y son los clientes los que me van haciendo que tenga más y más trabajo", comenta. Su producto llega a toda España y hasta a algunos puntos de Francia. Cuando comenzó no imaginaba que algún día se tendría que separar de su padre, "que se lo tomó bien", porque "ya no paraba".

Rafa se lo pone fácil a sus clientes y confecciona lo que este le demanda, "doy muchas facilidades porque fabrico a medida y se lo adapto al espacio que tenga, me dicen las medidas y a partir de ahí se lo fabrico". Ha encontrado el nicho de mercado perfecto porque que "en España podrá haber como mucho cinco empresas que fabriquen más y aquí en Huelva no hay nada, lo más cercano es en Sevilla".

Se encarga de todo el proceso. Recibe la idea del cliente, diseña las máquinas, pasa por el taller para dar un acabado perfecto a todos sus trabajos, "yo lo diseño todo, no como en las grandes empresas que tienen sus diseñares, técnicos, ...". Una vez finalizado todo "lo preparo, lo empaqueto y la empresa de transporte" se encarga de entregárselo a su destinatario. Un producto de oro.

Otra manera de ver el deporte y donde comienza todo. El primer paso lo da Rafa para que sus clientes disfruten y lo hagan de la mano de su marca, RPFitness, que está pretende "crecer lo máximo posible". Está en el camino porque ya son muchos los deportistas que confían en la labor de este moguereño que ha hecho de su hobby, su oficio.