El piragüismo, para ir abriendo boca
Vela l XXXVIII Semana Internacional Náutica Colombina
Participaron unos 150 palistas, ganando por clubes el Marítimo de Huelva, seguido por Mercantil y Algeciras
Las competiciones en la 38 edición de la Semana Internacional Náutica Colombina comenzaron ayer con la disputa de la XXI Regata de piragüismo Trofeo Ciudad de Huelva, proclamándose vendedor el Real Club Marítimo de Huelva.
La prueba contó con la participación de los clubes Mercantil, Lipasam y Sevillano de Piragüismo (Sevilla), Emiretae (Mérida), Alcázar (Cádiz), Algeciras, CAN Eslora (Sanlúcar de Barrameda), Portimao (Portugal) y los locales de Punta Umbría y Marítimo de Huelva, que presentaron un total de 150 palistas, quienes compitieron en las categorías de promesas, alevines A y B, infantiles A y B, cadetes absolutos (junior y senior), tanto masculino como femenino, y en las dos modalidades, kayak y canoa.
La clasificación general por equipos la encabezó el Real Club Marítimo de Huelva, completando el podio el Mercantil y el Algeciras.
Los ganadores individuales fueron Rafael Soriano Hernández, del Emeritae (categoría veteranos de 35 años K1); Rafael Viveros, del Sevillano (veteranos 45 años K2); Margarita Fernández, del Mercantil (veteranos damas K-1); Aída Laureano (damas cadete K1), David Rasco, del RCM Huelva (cadetes); Álvaro Pozo, del Lipasam (cadete C1); Alejandro Fernández, del Algecireño (benjamines); Marta Ramírez (damas benjamín), Mercedes Izquierdo (dama infantil K1), Alejandro Muñoz, del Algecireño (infantil A K1); Álvaro García, del RCM Huelva (infantil B K1); Ana Catarina, de Portimao (dama alevín K1); Alberto Alonso, del RCM Huelva (alevín A K1), y Elvis Barrios, del RCM Huelva (alevín B).
Otros ganadores de la prueba fueron Aída Laureano y David Rasco, del RCM Huelva (mixto promesas K2); Alberto Alonso y Ángel Abelleira, del RCM Huelva (mixto alevín K2); Antonio Sala y M. Ángel (senior), y Ana Ruz-Daniel Vindel, del Lipasam (mixto absoluto).
Todo funcionó a la perfección, tanto dentro como fuera del agua, en una jornada en la que los palistas llenaron de colorido, vistosidad y espectáculo la ría onubense, sobre todo con la salida de la prueba, realizada al estilo Sella, es decir, desde al orilla y no en línea, como suele ser habitual.
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