El nuevo sueño americano

Bajo la sombra de que el momento de colgar las botas está próximo, los veteranos del fútbol están encontrando en América razones de peso para seguir alimentando el hambre de nuevos desafíos. Por motivos económicos o sentimentales, jugadores treintañeros parten al nuevo continente en busca de nuevos sueños.

Y no siempre será el dinero. Como los seis millones de euros que a sus 35 años embolsará mensualmente Steven Gerrard en Los Angeles Galaxy, o los cerca de cinco millones y medio por los que su compatriota Frank Lampard ha comenzado a los 37 años una aventura en el New York City, a donde llegó primero Andrea Pirlo, de 36.

También las razones afectivas han movido a otras figuras a volver a casa. A los 36 años, y con una rica historia que comenzó en el Independiente argentino y siguió por el Manchester United, Villarreal, Atlético de Madrid, Inter, el Internacional brasileño y el Osaka, Diego Forlán vuelve a Uruguay para cumplir su sueño de jugar en el Peñarol, del que es hincha y en el que su padre triunfó en los 60.

Otro que ha cruzado el charco ha sido Carlos Tevez, que esperó menos y en la plenitud de sus 31 años dejó atrás su condición de ídolo de la Juventus para volver a Boca Juniors, en el que debutó a los 17 y con el que ganó Copa Libertadores, Copa Intercontinental y Copa Sudamericana.

Desde Canadá a Chile, el mercado de fichajes de futbolistas ha desbordado ríos de tinta en diarios y copado horas de atención en espacios deportivos. Didier Drogba, ahora con 37 años, es la esperanza del Impact Montreal en la MLS, en la que también aterrizó Giovani dos Santos, que deja el Villarreal para reforzar por cuatro temporadas al Galaxy a cambio de unos cuatro millones de euros anuales.

En Chile, David Pizarro, un veterano de 35 años con hoja de servicios en Udinese, Inter, Roma y Manchester City, decidió volver a donde todo comenzó en su carrera: el Santiago Wanderers. Su contemporáneo Rodrigo Tello, con 14 años de historia en Portugal y Turquía, ahora da esperanzas a la hinchada del Audax.

En el Apertura mexicano, que comenzó el 24 de julio y lleva tres jornadas, acaparan atenciones los fichajes del Tigres: André-Pierre Gignac, goleador del Marsella, Ikechukwu Uche, Jürgen Damm y Javier Aquino.

En Colombia el mercado resultó más atractivo por la llegada de dos entrenadores, aunque el delantero Daniel Angulo es visto con expectación por los hinchas del Independiente Santa Fe bogotano. El técnico Gerardo Pelusso, ex seleccionador paraguayo y con dilatada experiencia en clubes de su país, Chile, Ecuador, Paraguay y Perú, llegó al banquillo del Santa Fe en sustitución de Gustavo Costas. Y Reinado Rueda, ex seleccionador de Colombia, Honduras y Ecuador, dirige ahora al Atlético Nacional.

Bolívar, bicampeón boliviano, logró retener a Juan Miguel Callejón, hermano del jugador del Nápoles, para la temporada 2015-2016 y también consiguió el retorno de William Ferreira, tras el año que pasó con los Leones Negros mexicanos.

En Brasil destacaron dos fichajes. Sobre todo el del ex barcelonista Ronaldinho Gaúcho, que volvía a casa a sus 35 años y causaba un gran revuelo en Río de Janeiro al fichar por el Fluminese, después de su polémico paso por el Querétaro mexicano. También el delantero Paolo Guerrero ha ilusionado a la afición del Corinthians tras abandonar el Flamengo, donde ya ha dejado su marca como artillero.

Mientras, el excapitán de la selección uruguaya, Diego Lugano, de 36 años, dio un giro inesperado a su carrera al fichar por el Cerro Porteño, con el que se comprometió a jugar por un año, con opción de extenderlo.