Una igualada con un sabor muy amargo

Un gol a falta de seis segundos para la conclusión de la central Allison Pineau, la gran estrella francesa, dejó sin premio a un excepcional partido de la selección española femenina de balonmano, que debió conformarse con un empate (18-18) en un encuentro en el que mereció mucho más.

Tal y como había advertido la pivote Begoña Fernández tras la derrota sufrida en la primera jornada con Corea del Sur, el conjunto español debía "mejorar en todo" si quería tener alguna opción de vencer a Francia.

Una mejoría que no tardó en apreciarse, ya que desde el primer momento España se comportó como el combativo equipo, que hace apenas unos meses se colgó la medalla de bronce en el Mundial disputado en Brasil.

La defensa adelantada, un 5-1 con Eli Pinedo en el puesto de avanzado, por el que apostó de inicio el seleccionador español derrochó agresividad y solidaridad hasta desesperar a un conjunto francés, que llegaba pletórico de moral tras derrotar a la todopoderosa Noruega.

Confianza con la que se encargó de acabar definitivamente la portera española Silvia Navarro, que solventó cada mínimo error de la defensa española con un parada, hasta convertirse en un muro casi infranqueable para el equipo galo.

Esta circunstancia permitió a España sacar a relucir su veloz juego de transición para poner contra las cuerdas a la vigentes subcampeonas mundiales con un demoledor parcial de 0-6, que dejó el tanteador a los once minutos en un esperanzador 2-6.

Un equipo español al que por ponerle un pero en el primer tiempo, se le pudo achacar su incapacidad para sacar un mayor provecho a las exclusiones francesas, así como su escaso acierto desde la línea de siete metros, lo que impidió ampliar la ventaja al descanso (7-10).

Una ventaja que España no sólo logró aguantar, sino que incluso llegó a aumentar, hasta alcanzar una máxima renta de cuatro tantos (10-14) a los diez minutos de la reanudación.

Pero a las de Dueñas les quedaba aún todavía mucho por sufrir para doblegar a un equipo galo, que pareció redoblar sus esfuerzos con la llegada a la Caja de Cobre del presidente de la República Francesa, François Hollande, que asistió en directo a la segunda parte del encuentro junto con el primer ministro británico, David Cameron.

Su empuje permitió a Francia igualar la contienda (16-16) a poco más de cinco minutos para la conclusión aprovechando una exclusión de Vanessa Amorós. Un tiempo en el que el conjunto español demostró el carácter necesario para pelear por los metales, situándose de nuevo, con dos goles de Nely Carla Alberto y Marta Mangué, con una ventaja de dos tantos (16-18).

Aunque quizá careció de la fortuna y, sobre todo, de la templanza obligatoria para subir al podio, en un último minuto en el que un fallo en el lanzamiento de Macarena Aguilar y el posterior postrero tanto de Allison Pineau, la dejaron sin el premio de la victoria.

FRANCIA: Leynaud; Dancette, Ayglon (2), Pineau (2), Signate, Dembele (6) y Njitam (1). También jugaron Darleux (ps), Mendy (1), Daudouin, Herbrecht, Deroin, Tervel (5) y Lacrabere (1). ESPAÑA: Navarro; Carmen Martín, Mangué (6), Begoña Fernández (3), Eli Pinedo (2), Barnó (1) y Aguilar (2). También jugaron: Ciobanu (ps), Nely Carla Alberto (3, 2p), Beatriz Fernández, Cuadrado, Alonso (1p), Amorós y Elorza. Parciales: 2-0, 2-6, 5-8, 6-9, 7-10 y 7-10 (descanso) 9-11, 10-13, 12-15, 14-16, 16-16 y 18-18 (final). Árbitro: Horacek y Novotny (checos). Expulsaron por tres exclusiones a Mariama Signate (48'). Además excluyeron por dos minutos a Mendy, Herbrecht y Kamto Njitam por Francia; y a Nely Carla Alberto, Mangué (2) y Amorós por España.