Torres sale a hombros

"Esto es un fiestón", comentaba el loco Miralles cuando bajaba desde lo más alto de la plataforma donde los pilotos ejecutaron decenas de figuras durante toda la noche. Y vaya si lo fue. Los watios de sonido, la música discotequera, las luces parpadeantes y el rugido de las motos fueron los elementos necesarios para que un incansable público no dejase de animar durante toda la velada del pasado sábado.

Se colgó el cartel de "no hay billetes" en una abarrotada plaza de La Merced para presenciar el tradicional espectáculo de freestyle, que año tras año vuelve al albero onubense y que cumplía su novena edición. Y lo hacía con un cartel espectacular. Cuatro de los pilotos ya sabían lo que era vencer en el coso taurino: el extraterrestre Edgar Torronteras, el loco José Miralles, el noruego Andrè Villa y el hispalense Dany Torres. A este póker de ases los acompañaban dos jóvenes promesas en este deporte en el que los saltos, figuras y piruetas es lo importante: Víctor Córdoba y Pedro Moreno.

A las diez de la noche, la plaza de La Merced se quedó totalmente a oscuras. Los flashes de las cámaras de fotos y móviles de los asistentes alumbraban tímidamente el recinto. Como por arte de magia surgía un estallido de luz, color y sonido, que marcaba al impaciente público el inicio del espectáculo. Nadie quería esperar ni un solo minuto más.

El espectáculo comenzó con una ronda de saltos, en el que los seis pilotos ejecutaban figuras en el aire a modo de calentamiento para la siguiente ronda. Aunque no estaban permitidos los backflips (comúnmente denominado mortal hacia atrás), los deportistas se las ingeniaron para hacer entrar en calor a los más de 7.000 espectadores. Ya en la segunda ronda, esta vez clasificatoria para la final, cada uno de los protagonistas de la noche tendría que ejecutar cinco saltos, en los que se dejó constancia del gran nivel de esta cita. En esta semifinal ya estaba permitido la figura más espectacular por antonomasia del ferestyle. Las cartas ya estaban sobre la mesa. El primer backflip de la noche lo realizó Pedro Moreno, que consiguió arrancar los aplauso de los aficionados.

El que, a la postre, se llevase la carabela que le acreditaría como campeón absoluto, Dany Torres, se llevó una de las ovaciones más cerradas de la noche en su último salto de la semifinal. El sevillano de Arahal ejecutó un salto que puso los vellos de punta a más de uno, arriesgando lo máximo después de ejecutar una combinación de figuras precedidas por un backflip y recepcionando a pocos centímetros de la rampa. El público, totalmente entregado, ya empezaba a mostrar los pañuelos blancos de aprobación.

La nota negativa la puso una mala caída del debutante Pedro Moreno. El toledano se atrevió con otro backflip en el tercer salto de la semifinal, pero cuando quiso rizar el rizo al combinarlo con otra figura, una mala recepción en la rampa lo hizo caer sobre el albero onubense con la mala suerte de clavar las rodillas sin poder estabilizar su moto, lo que hizo enmudecer al público. El respetable, reconoció su valentía con una atronadora ovación mientras que estaba siendo atendido por los servicios médicos, ya en la zona de pilotos. "El médico me ha dicho que a simple vista no parece que esté rota, aunque ahora sólo pienso en descansar, reposar e intentar recuperarme lo más rápido posible", comentó posteriormente el joven saltador mientras se tocaba el bulto del tamaño de una pelota de tenis en una de sus rodillas.

El nivel demostrado por los pilotos en la velada de La Merced fue de tal magnitud, que el jurado tuvo que modificar el número de pilotos para disputar la gran final. Villa, Torres, Miralles y Torronteras fueron los elegidos. Los cuatro magníficos. El póker de ases. Los cuatro pilotos del cartel que han saboreado la miel del triunfo en Huelva en sus ocho ediciones anteriores fueron los culpables de trastocar los planes de la organización y hacer que un nuevo piloto se sumara a la fiesta final, frente a los tres que debían participar en un principio.

Ya en la última parte de la competición, con el público totalmente entregado, no hacía falta mucho espectáculo para que, salto tras salto, los asistentes se dejaran la garganta y las yemas de los dedos para gritar y aplaudir a los pilotos, que dejaron sus mejores figuras para la ronda definitiva. Finalmente, Dany Torres fue para los miembros del jurado el piloto que mejor ejecutó sus saltos y se llevó una nueva carabela de plata, revalidando el título del año pasado. En segunda posición acabó el extraterrestre Edgar Torronteras y por último, completando el pódium final, finalizó José Miralles. Aunque disputó la final, el noruego Andrè Villa no pudo entrar dentro de los tres mejores al quedarse en cuarta posición. Pero aún no acabó la cosa. Los pilotos que asistieron al mejor evento nacional disputado hasta la fecha, excepto Moreno, que se recuperaba aún en la zona de pilotos, arrancaban los últimos aplausos del fascinado público tras hacer varias rondas de un carrusel, en que los cinco deportistas saltaron uno detrás de otro a modo de 'trenecito'.

Una vez terminado el espectáculo, los saltadores se despidieron del público onubense. El speaker, incansable durante toda la noche, también aprovechó los compases finales de la velada para desearle mucha suerte a los pilotos en sus próximas competiciones, agradecer a los asistentes toda su energía y apoyo, y prometer que el año que viene, en el que se cumplirá la décima edición del evento, habrá muchas sorpresas para celebrar el aniversario "por todo lo alto".