21 puntos por disputar y solo 4 de desventaja con el play-off de ascenso. Con la permanencia virtualmente conseguida, el San Roque de Lepe viaja hasta la localidad pacense de Villanueva de la Serena para medirse al CF Villanovense (estadio Municipal Villanovense, domingo 17 horas), casualmente, el equipo que ocupa con 42 puntos -los mismos que el Montijo- la última posición que da derecho a jugar la fase de ascenso a Primera RFEF al final de la liga regular. Esto significa que un hipotético triunfo lepero le metería definitivamente en la pelea por esas posiciones y con todas las opciones abiertas para poder conseguirlo.

Los tres últimos partidos disputados por el equipo que entrena Antonio Fernández Rivadulla demuestran que está llegando al tramo final de la temporada en un buen momento de forma, después de pasar durante algunos tramos de la competición por la zona media-baja de la tabla, e incluso en algunos momentos por puestos de descenso. Así lo corroboran el convincente triunfo conseguido la semana pasada sobre el Cacereño, que llegaba a esa cita en segunda posición y tras cinco victorias consecutivas, junto a la buena imagen dejada en su visita al intratable Córdoba, salvo catástrofe, equipo de Primera RFEF en las próximas jornadas, y a la victoria cosechada una semana atrás en el complicado terreno del Montijo.

En estos últimos partidos la solidez y seriedad se están mostrando como principal característica del juego aurinegro, además ante equipos de la zona alta de la clasificación y sabiendo suplir las numerosas bajas gracias a la versatilidad de la plantilla y a un gran trabajo de equipo.

Para la visita a Villanueva de la Serena, el técnico del San Roque recupera tras sus respectivas lesiones a Víctor Morillo y a Tiago Cunha, con lo que dispondrá de más opciones en el juego de ataque, sobre todo en el juego por las bandas, mientras que pierde por acumulación de cinco amarillas a Iván Robles, lo que le deja sin lateral derecho, teniendo en cuenta que Migue Brenes, el otro jugador específico para ese puesto, no jugará más esta temporada por su lesión de rodilla. La opción más factible parece ser desplazar a Becken desde el centro hasta el costado de la zaga, ocupando su hueco Joel o Marrufo, o incluso los dos, volviendo a salir con defensa de cinco, ante la ausencia por lesión de Antonio López, el otro central de la plantilla.

El Villanovense que se encontrará el San Roque este domingo será muy distinto al que perdió 2-0 en la primera vuelta en el Ciudad de Lepe. En primer lugar, en su banquillo ya no estarán José Manuel Pavón como entrenador y Jesús Vázquez como su segundo, destituidos hace tres semanas. Su sustituto es el técnico serbio Josef Visnjic, con pasado en su época como futbolista, entre otros, en el Rayo Vallecano en Primera División. Tampoco están ya en la plantilla el exaurinegro Álvaro Gónzalez, Espín y el portero Sergio Tienza, los dos primeros por motivos que van más allá de lo estrictamente deportivo. A cambio, llegaron Gato, Hinojosa, Arribas y el portero con pasado aurinegro Álvaro Robles.

El equipo serón llega a este partido con la moral alta después de conseguir la semana pasada en Antequera su primera victoria como visitante después de mucho tiempo, además de ser también la primera victoria con Visnjic en el banquillo en su segundo partido. Estos tres puntos le han permitido al Villanovense volver seis jornadas después a puestos de play-off, una posición que intentarán mantener, mucho más ante un rival directo como el actual San Roque de Lepe.

El San Roque podría salir de inicio con David Robador; Becken, Alex Carmona, Joel, Fran Ávila; Adrián Ruiz, Charaf, Camacho; Tiago Cunha, Nané o Chuma, Víctor Morillo.