Máxima ambición pero con los pies en la tierra
Oltra asume las dificultades, aunque no renuncia a nada porque "el reto es mayor"
Tiene tablas, domina el discurso y sabe lo que quiere y cómo hacerlo. José Luis Oltra gana en directo, en la conversación. "Tiene madera de político", bromeó Enrique Pérez Viguera tras escucharlo exponer sus argumentos en La Tertulia Deportiva de Huelva Información.
El preparador protagonizó una cruda rueda de prensa el pasado martes. En ella expuso su análisis de la plantilla y del proyecto recreativista. "Lo que dije lo suscribo y no hay que dar más vueltas", destacó ayer. El técnico albiazul asume que "a la gente no hay que generarle expectativas sino que debe conocer la realidad". Tras esto añadió: "No renunciamos a nada porque ahora el reto es mayor". Las dificultades a las que se enfrenta son "básicamente de cantidad porque la plantilla es buena, pero muy corta sobre todo en defensas". No obstante, "me preocupa sobre todo que no hagamos gol".
El entrenador albiazul reconoció el trabajo del consejo presidido por Pablo Comas, quien "tiene mucha dedicación y hace todo lo posible para que le vaya bien al club". Igualmente aseguró que Víctor Hugo Mesa, máximo accionista, "desde la distancia está al tanto de todo".
Enrique Pérez Viguera respaldó al técnico. El subdelegado del Gobierno estuvo en el primer partido contra el Zaragoza y vio un encuentro "correcto y propio del inicio de la Liga". Destacó "a la defensa", si bien "es cierto que el equipo ansía el gol". Pérez Viguera confía en que "el Recre vuelva a estar en el sitio que merece". El onubense compartió con Oltra una queja generalizada. Como un aficionado más lamentó "los horarios como el del sábado porque a las cuatro de la tarde no irán ni algunos abonados. El público es fundamental y con esos horarios es muy difícil ir al campo". Recordando sus palabras del martes, Oltra afirmó que el Decano tiene dos activos fundamentales. Uno es su vestuario y el otro su afición. Los que acuden al estadio Nuevo Colombino "ayudan pero jugar un sábado a las cuatro de la tarde no es de sentido común porque para la gente no puede ser peor horario".
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