El joven onubense Javier López, tras proclamarse campeón del mundo de kite surf en la categoría Sub-16, ha vuelto a colocarse en lo más alto del pódium por segundo año consecutivo. Tras su éxito ha sido recibido en el Ayuntamiento de Huelva por el alcalde, Gabriel Cruz, y la concejala de Participación Ciudadana y Deportes, María Teresa Flores.

Al respecto, el primer edil se ha mostrado “realmente orgulloso de que Huelva vuelva a contar con un campeón del mundo de kite surf, un deportista con un enorme potencial que destaca en las distintas competiciones por la gran superioridad frente a sus rivales y todo ello con tan solo 14 años, por lo que estamos convencidos de que tiene por delante una carrera imparable”.

En este sentido, cabe señalar que el título mundial de esta modalidad se disputó en Tarifa, sede del kiteboarding junior a nivel internacional y lugar donde Javier López también se llevó el oro el pasado año en Sub-15, venciendo de nuevo en su especialidad, el Strapless. Además, hay que destacar que, siendo menor que sus rivales, el onubense arrasó las tres mangas que realizó, liderando la clasificación, las semifinales y la gran final.

De esta forma, gracias a este triunfo, el deporte onubense consolida un nuevo campeón dentro de la extensa lista de deportistas que están triunfando a nivel internacional. Una trayectoria insuperable que le ha llevado a recibir también a su corta edad reconocimientos tan importantes como los que otorga el Instituto Andaluz de la Juventud, los Premios Andalucía, en la modalidad de Jóvenes revelación, así como a haber sido nombrado Joven talentoso en la gala del 28-F.

Así, a pesar de su juventud, este deportista de la capital puede presumir de formar parte ya la élite del kite surf mundial y de que gracias a ello el nombre de Huelva esté sonando con mucha fuerza dentro de esta modalidad. Un deporte que aprendió de su padre, que le ha acompañado en esta cita en el Consistorio y que es su gran referente sobre la tabla, y quien lo introdujo con tan solo cinco años en una disciplina que se ha convertido en su auténtica pasión.