El Esuri A sigue creciendo

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Los dos equipos de La Merced perdieron en casa, el B ante el Alekhine y el C frente al Aleph

Imagen del encuentro entre La Merced C y el Aleph de Utrera.
Imagen del encuentro entre La Merced C y el Aleph de Utrera.
R. Martín-J. Morales /Ayamonte

05 de noviembre 2011 - 05:02

El equipo ayamontino Esuri A derrotó en casa por 3,5-1,5 al Reina Brillante de Córdoba, con lo que empata a puntos con éste y con el conjunto sevillano del colegio Claret, en la lucha por el ascenso a División de Honor. En cambio, los dos equipos de La Merced en la Primera Andaluza de ajedrez encajaron sendas derrotas en casa, por 1-4 el equipo B frente al Alekhine de Espartinas y por 2-3 La Merced C frente a los utreranos del equipo Aleph, con lo que se complican la permanencia, siendo La Merced C el farolillo rojo del grupo. En el otro encuentro de la jornada de este grupo, el colegio Claret derrotó a domicilio por 2-3 al Zinamomo de Gines.

El encuentro del Esuri A frente al líder del grupo D de la Primera Andaluza comenzó de forma accidentada, al no poder presentar ninguno de los dos equipos a su alineación completa, lo que determinó que sólo se disputaran los tableros 3º, 4º y 5º. En los tres se llegó a posiciones igualadas en el medio juego, y pronto se acordó tablas en la partida del isleño Jairo Samuel. En busca de asegurar definitivamente la permanencia, los ayamontinos ofrecieron tablas en las dos restantes partidas, pero los cordobeses, confiados en el superior ranking de sus jugadores las rechazaron, para posteriormente acabar derrotados por el jugador de Castillejos José María García Burguillo que jugó mejor que su rival un final de reyes que se alcanzó tras cambios de piezas mayores en una defensa siciliana, y por el joven ayamontino Javier Jesús Reyes que en los apuros de tiempo supo llevar al rey contrario a una red de mate en el centro del tablero.

En cambio, La Merced B perdió contra el equipo Alekhine-2 de Espartinas por 1-4. Alfonso Carlos Gómez planteó la apertura española contra Francisco Tamajón, consiguiendo tras una correcta defensa contra el ataque del sevillano, entrar en un final con peón de ventaja del onubense que por los apuros de tiempo del onubense empatar al visitante. Carlos López jugó un gambito volga contra Mario Gutiérrez, y aunque estuvo presionando la posición rival no consiguió más que tablas.

Peor suerte corrió el cuadro de Huelva en el resto de tableros, Así, José Carlos Del Arco, jugando contra la defensa Grunfeld de Ismael Alshameary, tuvo la iniciativa, pero en una posición complicada omitió la línea correcta por los apuros de tiempo del final de partida, perdiendo. El croata en filas onubenses, Nenad Srdoc, tuvo que realizar concesiones para parar un ataque de Álvaro Conejero, lo que le llevó a la derrota. Y Diego Gómez, jugando contra la defensa eslava de Alberto Bernad, debilitó su estructura de peones para evitar una ruptura crítica de su rival, perdiendo un peón y posteriormente la partida.

Por su parte, La Merced C encajó una nueva derrota, por 2-3, jugando en casa frente al equipo Aleph A de Utrera, a pesar de que tras un par de horas de juego estuvo dominando el marcador por 2-0, para luego perder las partidas restantes. Jonathan Espejo, jugando con negras con una defensa Alekhine contra el joven Miguel Santos, opuso un ataque en el flanco de rey al ataque central de su rival, al que terminó cazándole la dama materializando la victoria. Miguel Ángel Muñoz planteó una defensa Grunfeld contra Juan Antonio Mena, obteniendo control del centro y consiguiendo intercalar una oportuna jugada intermedia en el cambio de piezas menores que siguió al cambio de damas, obteniendo ventaja y la victoria.

En el primer tablero, Antonio Andrés, jugando contra la defensa india de rey de Juan Manuel Rivadulla, sacrificó dos peones por ataque, pero la correcta defensa de su rival le dio superioridad y una posterior entrega de pieza del onubense no le salvó de la derrota. A Anatoly Espejo se le complicó la partida contra Pedro Betancourt, teniendo que jugar con pieza y torre por dama, lo que finalmente le llevó a la derrota. En el quinto tablero, José María Espejo sacrificó un peón por ataque contra Miguel Ángel Barrera, pero una imprecisión del onubense a la hora de maniobrar con su caballo permitió un ataque del utrerano que le dio la victoria a éste, sellando la derrota local.

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