Carolina Marín comienza hoy su participación en el Abierto de Tailandia (Princess Sirivannavari Thailand Masters 2020), que se disputa en Bangkok y tiene la categoría Súper 300. La volantista onubense continúa con su periplo asiático que le ha llevado anteriormente por Kuala Lumpur (Malasia) y Yakarta (Indonesia), donde el pasado domingo se adjudicó la medalla de plata en la competición tras caer en la gran final ante la tailandesa Ratchanok Intanon (10-21, 21-11 y 18-21) .

La jugadora de Huelva, que parte como cabeza de serie número 4 en Bangkok, se cruza hoy en la primera ronda con la surcoreana Kim Ga Eun, a quien ha derrotado en sus dos enfrentamientos anteriores, ambos disputados el pasado año, en enero en Indonesia (18-21, 21-12 y 21-18) y en noviembre en India (22-20, 21-16).

Carolina ha demostrado que está de vuelta y sigue siendo una de las mejores jugadoras del mundo, tras sufrir el pasado año el episodio más duro de su brillante carrera deportiva. En enero de 2019, mientras disputaba la final del Masters de Indonesia, se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y después de pasar por el quirófano estuvo más de siete meses de dura recuperación hasta que pudo regresar en septiembre a la competición.

Medalla de oro olímpica en los Juegos de Río de Janeiro en 2016, tricampeona mundial (Copenhague 2014, Yakarta 2015 y Nanjing 2018) y tetracampeona europea (Kazán 2014, La Roche-sur-Yon 2016, Kolding 2017 y Huelva 2018) la onubense acabó 2019 en el puesto número 10 del ranking mundial. Este año ha comenzado con fuerza y ha superado a rivales muy cualificadas siendo semifinalista en Malasia y finalista en Indonesia. En su mente está el revalidar en verano en Tokio (Japón) el oro olímpico que conquistó en Brasil y volver a conquistar algunos de los torneos más prestigiosos que existen, como puede ser el All England, conocido como el Wimbledon del bádminton, que ganó en 2015 y en el que no pudo participar el año pasado al estar lesionada.

A partir de este momento la onubense empieza a sumar puntos en todos los torneos que participe -en Indonesia defendía los puntos de llegar a la final el pasado año- y podrá ascender posiciones en el ranking mundial, algo que le permita ser cabeza de serie en los Juegos.