Carolina Marín hace historia

La onubense, de sólo 15 años, juega hoy la gran final del Europeo ante Anne Hald

Carolina Marín, en acción durante un encuentro disputado esta temporada en Huelva.
Carolina Marín, en acción durante un encuentro disputado esta temporada en Huelva.

Carolina Marín acaba de conseguir un hito en la historia del bádminton español al clasificarse para la final del Campeonato de Europa sub 19 que se está disputando en Milán (Italia). Hasta el momento ningún jugador español había conseguido llegar tan alto en este torneo, tan sólo el roteño Ernesto Velázquez en 2007 logró la medalla de bronce individual masculina. Con el pase a la final, la jugadora onubense del CB IES La Orden, de tan sólo 15 años, se asegura la medalla de plata.

Hoy luchará por el título continental contra la danesa Anne Hald. Este encuentro, que comenzará a las 11:15 horas, se podrá seguir en directo a través de televisión online en el siguiente link: mms://194.242.241.200/BMT_live.

En la semifinal disputada ayer, Marín ganó a la jugadora belga Lianne Tan, número tres del ranking junior europeo. La onubense empezó perdiendo el partido por 18-21 en el primer set y sin embargo, pese a su juventud fue capaz de remontar el encuentro y, de propinar una paliza a la belga en el tercer set. Resultado final:18-21/ 21-13 / 21-8. Al finalizar el partido la jugadora de Huelva no fue capaz de contener la emoción y rompió a llorar.

La trayectoria de Carolina en este campeonato ha sido impecable. Con un cuadro de juego difícil desde su primer encuentro, ha sido capaz de ganar a dos cabezas de serie del torneo, a la jugadora número uno de Inglaterra, Kate Robertshaw, y a la número tres del ranking europeo.

Los resultados para el equipo español y para Huelva, podrían haber sido aún mejores si en el partido de octavos de dobles femeninos Carolina, junto a su compañera de club Ana María Martín, hubiesen aprovechado alguno de los nada menos que cinco puntos de partido de que dispusieron ante las alemanas Isabel Herttrich-Inken Wienefeld, cabezas de serie nº 8. Fue un partido con un primer set para las españolas muy ajustado por 22-20, con continuas alternativas en el marcador; en el segundo la tónica fue idéntica hasta el descanso a partir del cual las alemanas se distanciaron para vencer por 12-21; pero el tercero sería también muy igualado, con continuas alternativas en el marcador y un final de infarto en el que faltó un poco de suerte.

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