Belmonte, en su segunda final

Deprisa, todo va muy deprisa para la española Mireia Belmonte en Londres, quien se clasificó para su segunda final olímpica, en esta ocasión la de los 200 mariposa, después de firmar el cuarto mejor tiempo de las semifinales.

A la badalonesa se la ve más relajada y con el paso de los días ha dado lo mejor de sí. Antes de saltar a la piscina, Belmonte sabía de la dificultad de clasificarse entre las ocho mejores debido al nivel de la prueba con la estadounidense Kathleen Hersey y la china Liuyang Jiao como cabezas de cartel.

Pero saldó muy bien el compromiso. Está más relajada, de no acudir un día a la zona mixta ha pasado a esbozar sonrisas e incluso a bromear por su corte de pelo: "Lo llevo más corto, así peso menos", dice.

Otra cosa será optar a la medalla en los 200 mariposa. "Va a ser muy difícil, porque hay mucho nivel y si quiero estar en el podio tendré que bajar un segundo mi mejor marca", comentó tras la carrera.

La badalonesa estuvo rápida en los últimos 50 metros, sufrió al final, pero consiguió uno de los objetivos, tal vez de los que menos esperaba. Con 21 años, Mireia Belmonte parece haber alcanzado el punto de madurez preciso y aún tiene una bala en la recámara, los 800 metros, la prueba en la que tiene más opciones, pero eso será el jueves. La otra española, Judit Ignacio, quedó eliminada.