Alcaraz vuelve a "mi casa"

Como si hiciera apenas dos días de su marcha, con muchos rostros conocidos y "más ilusión que la primera vez". Así aterrizó Lucas Alcaraz en el Nuevo Colombino para recoger el testigo de Manolo Zambrano, destituido ayer mismo por la mañana. El granadino llega con la misión de lograr la permanencia "para lo cual me siento preparado y creo que hay suficiente equipo, aunque como todos me conocen en Huelva habrá que ir partido a partido". El preparador se compromete con el Decano hasta final de temporada, sin que en principio se establezca compromiso alguno para la siguiente, sin bien todas las partes entienden tácitamente que no habría inconvenientes en caso de cubrir los objetivos marcados.

Alcaraz llega a un club que "ha crecido mucho desde mi anterior etapa. Creo que entonces sentamos las bases de lo que es ahora y por eso me hace tanta ilusión poder trabajar en lo que yo ayudé a construir. Quiero transmitir mi ilusión y mis conocimientos para aportar mi granito de arena a conseguir la permanencia en la categoría".

La elección del granadino implica muchas ventajas. Fundamentalmente porque "conozco la casa y vengo con mucho entusiasmo para que la plantilla sea lo más competitiva posible y lograr el objetivo". De hecho ya dirigió al Recreativo en tres campañas, la 2000-01, cuando dio el salto a la Segunda División A en los despachos y rozó otro milagro, la 2001-02, en la que subió al equipo a Primera División, y la 2002-03, en la que el conjunto onubense descendió pero disputó la final de la Copa del Rey, el mayor hito de la historia recreativista.

No sólo no le es ajeno el club, sino que dispone de amplios conocimientos sobre los futbolistas que tendrá a sus órdenes. Ha seguido las evoluciones del equipo durante la pretemporada y la Liga porque "he visto al equipo jugar el Trofeo Colombino y, por suerte, todos los partidos en Primera División son televisados y he tenido la oportunidad de verlos", apuntó Alcaraz, quien añadió que la plantilla está "pensada para conseguir el objetivo de la permanencia" y creo que "lo vamos a conseguir con el trabajo y el compromiso de todos".

Evidentemente su regreso a Huelva es especial. El Recreativo "no es un club más", al recordar que estuvo en esta entidad "en una etapa muy importante de mi carrera deportiva por lo prolongada que fue, lo que conseguimos y lo mucho que le debo a todo aquello". En este sentido recalcó: "Dentro de mi trayectoria profesional fue una etapa en la que maduré bastante y tengo muchos recuerdos y casi todos buenos. Vengo con la misma ilusión que la primera vez pero con connotaciones que antes no existían, lo que hace que ahora sea todavía más ilusionante para mí si cabe", aludiendo a los setenta partido que suma ya como entrenador de la máxima categoría.

El nuevo técnico albiazul, que la pasada temporada dirigió al Real Murcia y que en esta no tenía equipo, explicó lo fácil que fue el acuerdo porque "no es un club más, es un mi casa y volver a casa siempre es mucho más fácil. Cuando ellos me llamaron todo fue positivo desde el primer momento y prácticamente cerramos el acuerdo a la primera. Ahora lo que nos queda es trabajar y hacer todo lo que esté en nuestras manos para lograr la salvación del equipo". Para ello "la misión es intentar que la plantilla dé el máximo rendimiento, alcanzar con ellos el máximo compromiso y luego que los avatares de la competición estén con nosotros también, porque es parte del juego".

Tuvo incluso palabras de solidaridad y cariño para Manolo Zambrano, a quien recordó su presentación porque "no dudo que ha hecho todo lo posible pero hay que tener respeto por él. A mí también me ha sucedido en ocasiones que la pelota no entra y eres víctima de los resultados. En el fútbol a veces lo das todo y el fútbol no te da nada o al revés".

Por su parte, el presidente del club, Francisco Mendoza, señaló que el cese de Zambrano fue "difícil de tomar como todas las decisiones de este tipo" y que el consejo de administración no lo ha destituido "por capricho". "Pensamos que el equipo necesitaba que se hiciera esto y se ha hecho", puntualizó Mendoza, quien aclaró que "sencillamente se ha pensado que el club necesitaba un cambio, un revulsivo y por doloroso que pueda ser había que tomar la decisión".