Algunas claves del acuerdo sobre Gibraltar: España controlará los pasaportes

La Policía Nacional española, y no Frontex, realizará los controles Schengen en puerto y aeropuerto gibraltareños, mientras desaparece la Verja tras más de tres años de negociaciones

La UE y Reino Unido alcanzan un acuerdo "político definitivo" e histórico que permitirá el libre acceso de Gibraltar al espacio Schengen

Imagen de la aduana del Peñón
Imagen de la aduana del Peñón / Erasmo Fenoy

España asumirá el control de pasaportes en el puerto y aeropuerto de Gibraltar tras el histórico acuerdo político alcanzado este miércoles en Bruselas entre Reino Unido y la Unión Europea. Este pacto, que supone un hito en las relaciones entre ambos territorios, contempla la eliminación definitiva de la Verja, última barrera física que separa a Gibraltar del territorio español, según establece la declaración conjunta firmada por las partes implicadas.

El documento, publicado tras la reunión mantenida entre el comisario europeo Maros Sefcovic, los ministros de Exteriores español y británico, José Manuel Albares y David Lammy, y el ministro principal gibraltareño, Fabian Picardo, especifica que se establecerán "controles fronterizos duales Gibraltar y Schengen en el puerto y el aeropuerto de Gibraltar". Esta fórmula permitirá suprimir todos los controles en el actual paso fronterizo entre Gibraltar y La Línea de la Concepción (Cádiz), facilitando así el tránsito diario de miles de personas que cruzan en ambas direcciones.

La declaración aclara un punto que había generado controversia durante las negociaciones: "Por parte de la Unión Europea, España realizará los controles Schengen completos". Esta decisión descarta la propuesta inicial de que fueran agentes de Frontex quienes realizaran dichos controles durante un periodo transitorio de cuatro años, opción que había sido contemplada ante las reticencias de Londres y Gibraltar a la presencia de agentes españoles en el Peñón. Mientras tanto, "los controles gibraltareños completos seguirán llevándose a cabo como hasta ahora" por parte del Reino Unido.

Un acuerdo histórico que elimina "el último muro de Europa continental"

El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, ha calificado el acuerdo como histórico durante la rueda de prensa posterior a la reunión. "Con este acuerdo desaparecerá la Verja, el último muro de la Europa continental y queda garantizada la libertad de circulación de personas y mercancías. Gibraltar estará conectado con el espacio Schengen, ejerciendo España el control de entradas y salidas", ha manifestado Albares, quien ha confirmado que será específicamente la Policía Nacional la encargada de realizar estos controles.

El acuerdo representa un avance significativo tras más de tres años de complejas negociaciones que comenzaron tras el Brexit. Albares ha destacado también que "el aeropuerto beneficiará a toda la comarca, posibilitando vuelos comerciales tanto británicos como españoles y europeos", lo que supondrá un impulso económico para la región.

Antes de comparecer ante los medios, el ministro español informó del acuerdo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien según Albares ha seguido las negociaciones "minuto a minuto". También mantuvo una conversación con el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y ha anunciado su intención de comparecer en el Congreso de los Diputados para dar cuenta del acuerdo, además de reunirse en los "próximos días" con los alcaldes de los municipios del Campo de Gibraltar.

La posición británica: soberanía intacta y modelo similar al de Francia en Londres

Por su parte, el Gobierno británico ha emitido un comunicado separado en el que aclara aspectos fundamentales para sus intereses. Londres ha subrayado que "la inmigración y la ley y el orden en Gibraltar seguirán siendo competencia exclusiva de las autoridades gibraltareñas", estableciendo así una línea roja en cuanto a la soberanía del territorio.

Anticipándose a las críticas que podría generar la presencia de policías españoles controlando los pasaportes de ciudadanos británicos que lleguen al Peñón, el Foreign Office ha establecido un paralelismo con otra situación similar en territorio británico: los agentes españoles "serán responsables de garantizar la integridad del Espacio Schengen, en un modelo similar a la Policía francesa que opera en la estación londinense de St Pancras", desde donde parten los trenes Eurostar con destino a París.

Respecto al uso compartido del aeropuerto, otro de los puntos conflictivos durante las negociaciones, Londres ha destacado "la oportunidad para que operen vuelos desde el aeropuerto gibraltareño a destinos en la UE, incrementando la conectividad de Gibraltar con el Peñón y mejorando su prosperidad".

Implicaciones para la movilidad y el comercio en la zona

El acuerdo tendrá un impacto directo en la vida cotidiana de miles de personas. Aproximadamente 15.000 trabajadores cruzan diariamente la frontera entre La Línea y Gibraltar, muchos de ellos residentes españoles que trabajan en el Peñón. La eliminación de la Verja supondrá un ahorro considerable de tiempo y la desaparición de las habituales colas que se forman en el paso fronterizo, especialmente en horas punta.

En el ámbito comercial, la inclusión de Gibraltar en el espacio Schengen facilitará el flujo de mercancías entre el Peñón y España, eliminando trámites aduaneros que hasta ahora ralentizaban las transacciones comerciales. Los comerciantes de ambos lados esperan que esta medida impulse la actividad económica en una región que ha sufrido históricamente altas tasas de desempleo.

Además, la apertura del aeropuerto a vuelos procedentes de España y otros países de la UE podría transformar Gibraltar en un hub de transportes para el sur de España, beneficiando al sector turístico tanto del Peñón como del Campo de Gibraltar.

¿Qué es la Verja de Gibraltar?

La Verja de Gibraltar es una frontera física que separa el territorio británico de Gibraltar del municipio español de La Línea de la Concepción, en la provincia de Cádiz. Construida originalmente en 1909 como una barrera militar, la Verja se ha convertido en un símbolo de la disputa territorial entre España y Reino Unido sobre Gibraltar.

A lo largo de la historia, este paso fronterizo ha experimentado diversos periodos de apertura y cierre. El más significativo ocurrió en 1969, cuando la dictadura franquista ordenó su cierre total, aislando a Gibraltar del territorio español. La Verja no volvió a abrirse completamente hasta 1985, coincidiendo con la entrada de España en la entonces Comunidad Económica Europea.

Con el acuerdo alcanzado, este vestigio histórico de separación desaparecerá después de más de un siglo, simbolizando una nueva era en las relaciones entre Gibraltar y España, aunque sin alterar las posiciones de ambos países sobre la soberanía del territorio.

¿Cuándo entrará en vigor el acuerdo sobre Gibraltar?

Aunque se ha alcanzado un acuerdo político, aún queda pendiente la formalización del mismo mediante un tratado vinculante entre la Unión Europea y el Reino Unido. Las partes implicadas deberán negociar ahora los detalles técnicos y jurídicos del acuerdo, un proceso que podría llevar varios meses.

Una vez finalizada esta fase, el tratado deberá ser ratificado por las instituciones correspondientes tanto en Reino Unido como en la Unión Europea. Aunque no se ha establecido una fecha concreta para la entrada en vigor del acuerdo, fuentes diplomáticas apuntan a que podría materializarse a lo largo de 2024, poniendo fin a un periodo de incertidumbre que comenzó con el referéndum del Brexit en 2016.

¿Cómo afectará este acuerdo a la reclamación española sobre Gibraltar?

El Gobierno español ha sido claro al señalar que este acuerdo no afecta en modo alguno a la posición de España respecto a la soberanía de Gibraltar. Madrid mantiene su reclamación histórica sobre el Peñón, cedido a Gran Bretaña en 1713 mediante el Tratado de Utrecht.

El ministro Albares ha subrayado en varias ocasiones que se trata de un acuerdo pragmático que busca mejorar la vida cotidiana de los ciudadanos a ambos lados de la frontera, sin renunciar a los derechos históricos de España sobre el territorio. Esta postura es compartida por todos los partidos políticos españoles, que consideran la recuperación de la soberanía sobre Gibraltar como una política de Estado que trasciende los cambios de gobierno.

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