El final de cada año natural coincide con la celebración del cumpleaños del equipo más antiguo del país, el Recreativo de Huelva. Y aunque con más penas que glorias deportivas, en los últimos años siempre ha habido lugar para la celebración de un momento, que visto lo visto, es todo un milagro en tiempo de Navidad.

El Decano es un símbolo y actos simbólicos, más allá de su potencia o relevancia, son los que van poniendo granitos de arena y acaban construyendo una montaña de recreativismo. Y para muestra algunos botones que podrían haber formado parte de una programación albiazul por la efemérides: el acto de la Escuela de Valores, la presentación del libro No quiero verte llorar de Juanma Garrido, el encuentro del domingo ante el Jumilla o la próxima jornada de convivencia de la cantera y la Escuela de Fútbol del Recre. Eventos que, organizados directamente por el club o no, podían haberse unido bajo un mismo paraguas, que hubiera dado más visibilidad al cumpleaños del Decano.

Aun así, es una buena noticia que el recreativismo siga tan vivo en momentos tan difíciles. Y seguro que en los próximos días desde el club no se dejará escapar la fecha del 128 cumpleaños para felicidad de toda la ciudad.

Y en este tiempo de ilusión seguiremos esperando el regalo que todos queremos. El final de año podría ser más especial si llega la noticia que todos deseamos. Hacienda y el Ayuntamiento de Huelva parecen acercar posturas y el desbloqueo de las cuentas del Decano parece ahora más cerca que nunca. En la carta a los Reyes Magos de los recreativistas, seguro que este deseo está en primer lugar.

Diciembre siempre ha sido un mes cargado de emoción que el Recre no siempre ha sabido o ha podido aprovechar. Ojalá que el domingo se comience a construir el cumpleaños soñado, que con tres puntos será aún más dulce.