El misionero canario Claudio Ojeda de 62 años, que estuvo destinado en Ayamonte durante cinco años en la congregación de San Vicente de los Paúles, se encuentra entre las víctimas del accidente aéreo de Barajas que ha costado la vida a 153 personas, aunque su cuerpo "aún no ha sido identificado".

Según explicó un miembro de la congregación San Vicente de los Paúles, el padre Juan de la Rosa, el misionero venía del país africano de Camerún, donde estaba destinado en la actualidad y se dirigía a Las Palmas "para pasar las vacaciones con su familia".

Tal y como explicaron fuentes familiares de la víctima al padre de la Rosa, su cuerpo "aún no ha sido identificado, aunque ya están haciendo las correspondientes pruebas de ADN".

Según señaló el padre Juan de la Rosa, la familia "está muy afectada" y en Ayamonte el hecho ha creado un "gran estupor, ya que Claudio Ojeda era conocido en el pueblo".

Por último apuntó que el cuerpo del misionero será enterrado "en su tierra, en Las Palmas, pero que aún no se sabe la fecha, al no estar identificado todavía".