Cuarenta minutos después del horario previsto, el Santo Entierro salió por la Plaza Virgen de las Angustias en lo que supone la procesión oficial de la Semana Santa onubense. La parte trasera de la ermita estaba llena de gente que esperaba ver el singular cortejo de esta cofradía, único en toda Huelva debido precisamente a ese carácter de oficialidad que ostenta.

El paso de la Virgen de las Angustias siguió mostrando los cambios de los que está siendo objeto. Destacaba sobremanera el sudario de la cruz así como el acompañamiento musical que corrió a cargo de la Banda de Música Juvenil de la Cruz Roja de Sevilla.

Tras los músicos, se inició el desfile de las hermandades de penitencia siguiendo el orden de entrada en Carrera Oficial y provistas de sus respectivos hábitos de nazarenos, incluida El Resucitado. A éstas les siguió la representación de la gestora de la Hermandad de la Cinta y los miembros de la junta de gobierno del Consejo de Hermandades y Cofradías.

El impresionante Señor Yacente fue una vez más, el único paso llevado por mujeres que asimismo, cuenta con la única capataz de la Semana Mayor de la capital. A éste le siguió una representación de los distintos ejércitos. Posteriormente, ocupó su lugar la representación civil abriéndola la Universidad de Huelva con su rector, Francisco Ruiz, y la doctora Aurora López. La comitiva incluyó asimismo a la subdelegada del Gobierno, Asunción Grávalos y al presidente de la Audiencia, Antonio Pontón. La parte política la abrió el vicepresidente de la Diputación, José Fernández acompañado de maceros. La representación del Ayuntamiento la abrieron los concejales de los grupos de Ciudadanos, Partido Popular y miembros del equipo de gobierno municipal que antecedieron al alcalde Gabriel Cruz acompañado de maceros.

Se hizo un gran silencio en la Plaza Virgen de las Angustias a la salida del palio de la Soledad de María mientras que se escuchaban los primeros sones interpretados por la Banda Sinfónica Municipal de Huelva. Tras el paso de palio y cerrando la comitiva, el obispo de la Diócesis, José Vilaplana con dos miembros del cabildo catedralicio: José Arturo Domínguez y Feliciano Fernández.

Dentro de los cambios de la que está siendo objeto esta veterana hermandad, volvió a consolidarse el paso del cortejo por el angosto callejón del Santo Entierro que permite el acceso a la calle San Andrés y de ahí, recuperar el tradicional recorrido una vez que la comitiva ha llegado a la Plaza de San Pedro.

La Hermandad del Santo Entierro hizo un gran esfuerzo para alcanzar la Placeta a la hora estipulada tras la reordenación llevada a cabo por el Consejo de Hermandades . Tan sólo entró diez minutos después de lo marcado llegando su cruz de guía a la confluencia de José Nogales con la Placeta, a las 22:20.

Como es habitual, su paso por el centro fue seguido por un gran respeto no solo por el sentido de riguroso luto que ostenta esta cofradía, sino también por el hecho de que de manera inconsciente pero muy gráfica va lanzando el mensaje a todos los presentes, de que la Semana Santa se acaba lo que desde luego, es una mala noticia para todos los amantes de las procesiones que en Huelva son mayoría como un año más se ha demostrado.

En el momento en que el palio llegó al palco de autoridades de la Plaza de la Constitución, lo esperaban el alcalde Gabriel Cruz y el presidente del Consejo de Hermandades, Antonio González.