El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha reforzado las plantillas de los consultorios de Matalascañas y El Rocío, en Almonte, dentro del Plan de Atención Sanitaria que cada verano desarrolla en los principales enclaves turísticos de la provincia, con el fin de garantizar la calidad asistencial, tanto para la ciudadanía onubense como para la población que visita la provincia en este periodo.

Este operativo provincial, que se ha ampliado en relación al del año pasado en 22 personas más, con un total 125 profesionales, se desarrolla en los centros de salud de los núcleos costeros, a los que se suma también el de El Rocío, que amplían sus plantillas con objeto de ofrecer una respuesta sanitaria adecuada a residentes y visitantes. De los 125 profesionales contratados sólo para este dispositivo de apoyo, 49 son médicos, 50 enfermeras y 26 personal auxiliar (administrativos y celadores-conductores), según informó la Junta.

El operativo se ha incrementado en 22 personas respecto al año pasado

Así lo puso de manifiesto el delegado territorial del ramo, Rafael López, que estuvo acompañado por la alcaldesa de Almonte, Rocío Espinosa, con motivo de una visita que realizó ayer a los centros sanitarios ubicados en Matalascañas y El Rocío, dos de los nueve enclaves turísticos de Huelva que ven reforzado su personal en los meses de verano con la finalidad de atender al incremento poblacional que experimenta esta zona de la provincia.

Para ambos centros sanitarios se han contratado, como refuerzo de la plantilla habitual, ocho facultativos y once enfermeros más, además de cinco celadores y personal administrativo. De esta forma, se puede garantizar la atención sanitaria tanto a adultos como de forma específica, a la población infantil, además de reforzar significativamente la atención urgente en ambas poblaciones. En el caso de la aldea de El Rocío, vuelve a contar, por segundo año, con un equipo médico las 24 horas del día.

El responsable provincial, que también estuvo acompañado durante la visita por los profesionales de los centros sanitarios y por la directora del Distrito Sanitario Huelva-Costa y Condado-Campiña, Alicia Cominero, destacó este dispositivo de refuerzo que la Junta activa cada año y que se desarrolla también en los centros de salud de Ayamonte, El Rompido, La Antilla, Isla Cristina, Punta Umbría, El Portil y Mazagón.

La planificación de la atención sanitaria en verano se basa en la experiencia de años anteriores y el balance de la actividad registrada en cada zona de la comunidad, que muestra un comportamiento diferente en las zonas de interior y las zonas costeras. Así, en los centros de atención primaria, los recursos se organizan y concentran para dar respuesta a las demandas de los ciudadanos en esta época, prestando especial atención a los movimientos de población hacia las zonas costeras.

Dentro del Plan Provincial de Atención Sanitaria para el verano, que incluye a Atención Primaria y hospitales, el SAS se encuentra contratando durante los meses de verano a un total de 1.263 profesionales en los centros sanitarios onubenses para la cobertura de la plantilla durante los meses estivales, lo que supone un incremento del 28% respecto a las contrataciones realizadas el año pasado, que ascendieron a 983.

Desde la Delegación se ha destacado el incremento de contratos que se ha producido este año respecto al anterior, el mayor desde el inicio de la crisis económica, que permitirán garantizar la respuesta a la demanda de atención sanitaria en esta época, con especial atención en las zonas costeras que concentran mayor volumen de población a lo largo de estos meses.

Estos nombramientos posibilitarán cubrir a los profesionales de los hospitales y centros de Atención Primaria necesarios para dar respuesta a la demanda prevista. El coste de los mismos requiere en Huelva una inversión de 7,9 millones de euros, lo que conlleva un aumento de 1,9 millones respecto a 2016 (un 32 % más), en el que fue de 6 millones.

El Plan de Verano se desarrolla entre el 15 de junio y el 30 de septiembre de cada año y su diseño ha estado precedido de un intenso trabajo de planificación y conversaciones con las organizaciones sindicales de la mesa sectorial y juntas de personal de los centros. En cualquier caso, el plan se monitoriza y adapta permanentemente para dar respuesta a posibles incrementos de la demanda asistencial.