Pepe Doblado vuelve a los carteles de Abril en Palos. Una plaza en la que el pasado año marcó un tremendo alboroto frente a un excelente toro de Gerardo Ortega. Un año después todo parece volver a comenzar.

-¿Cómo se encuentra usted, torero a pocos días de volver a su plaza?

-Me encuentro bien, con ilusión porque sin ilusión es muy difícil estar aquí como yo estoy.

En abril tuve la oportunidad de ofrecer sobre todo a mi gente, lo difícil es hacerlo en casa, en mi plaza, ofrecer lo que yo siempre había soñado, el poder torear un toro como tú sientes por dentro. Eso es muy difícil porque en realidad eso es lo que tú sueñas todos los días y casi nunca sale porque se tienen que conjugar como tú sabes pues muchas cosas. El año pasado lo logre y por eso te puedo decir que todo esto es un punto y aparte porque ahora voy a poder torear sin el agobio de querer lograr lo que ya tuve en abril. Yo pienso que ahora me van a mirar desde otro punto de vista, no tengo esa presión y voy más consciente de que aquello ya pasó y ojalá vuelva a pasar que eso es lo que yo quiero.

-Parecía que Doblado tenía que presentar siempre el currículo por aquello de torear en Palos, delante de esa gente con la que a diario convive un torero...

-Pues sí, porque en un torero como yo que torea muy poco, cuesta más expresar lo que se lleva dentro porque se tienen que conjuntar muchos factores. En este caso mucho más porque si toreas poco, la preparación es mínima, es difícil que un toro bravo que pide un torero delante, te salga en ese momento el toreo que merece semejante toro. Me queda la tranquilidad de haberlo podido hacer como te decía no por la gente que me conoce y que me quiere porque ellos a lo mejor si me ha visto hacerlo en el campo, pero había que hacerlo en la plaza y gracias a Dios lo he podido hacer y ya nadie podrá recriminar que Doblado solo torea en Palos porque es mi plaza..

-Pero no me negarás que aparte de tranquilidad también le añade responsabilidad porque ahora que saben que eres capaz van a estar esperando a que lo hagas otra vez….?

-Por supuesto. Pero mira Paco, otros años se han estado acordando de que he estado cuatro minutos esperando a portagayola esperando a un toro. ¿Tu sabes lo que duele eso a un torero?, ¿que se acuerden de eso? Yo siempre he dicho que yo quería que recordaran aunque solo fuese un muletazo, una media, un detalle. No ya una faena porque podía parecer pedir mucho…. Pero es que han tenido la faena, han sido diez o doce naturales sentidos, a mi forma, pero que yo me siento realizado con lo que hice y además lo que es abrochar una faena desde principio hasta fin, porque sabes que la espada ha sido siempre mi cruz y esta vez no falló. Yo creo que ha sido mi faena más redonda de todo lo que llevo hecho y desde luego como matador, la mejor.

-¿Admite que le apunte que a veces también hay que ponerse algunas tardes cuatro minutos a portagayola?.

-Sí. Porque he sido siempre un torero más bien frío. Un torero de corte clásico suele dar casi siempre una imagen de torero frío y yo también presiento muchas veces que estoy allí ante mi gente, ante mi peña, en mi terreno y además muy bien acartelado entre dos figuras del toreo, pues siempre me planteo dos cosas: ¿espero lo que quiero hacer delante de un toro o lo busco? Y ante esa disyuntiva siempre me encuentro donde realmente he tenido que estar. Unas veces a portagayola, otras en el centro del ruedo de rodillas, si me tengo que dejar coger por la barriga por un toro, dejándome coger como me ha cogido porque era la forma de suplir la manera técnica de hacer la suerte, pues se hace porque uno lo mínimo que tiene que ganarse en la plaza es el respeto, aunque después cuajar un toro, sea lo que busca un torero..

-Muchos dicen que estás loco. Tienes una vida hecha, una familia que tira como es normal mucho para casa, lo difícil que está siempre esto…

-Bueno loco o no, ¡Bendita locura ésta! Porque ésta es mi vida. Si es verdad que cuesta mucho trabajo porque son muchas cosas. Estar en torero, vivir en torero, prepararte a fondo, alternar en el campo con los compañeros. Y si es difícil para ti, imagina como lo será para quienes te rodean, los que te perciben momentos malos y duros y sobre todo la soledad, porque sí es verdad que en una plaza el torero está solo, pero cuando no está en la plaza y está esperando una plaza, ahí si que pesa la soledad..

-De lo que sí debes ser consciente es que con el argumento Doblado, Palos también gira de una forma muy especial en el panorama de la Fiesta.

-Hombre yo siempre lo he pensado. Es verdad que con la ayuda de mucha gente, se ha logrado componer una cosa importante, que funciona como había soñado y a mí me da muchas fuerzas para seguir, veo el apoyo de mucha gente, y bueno, todo es muy bonito. ¿Que se ha despertado la afición por mí?, pues estupendo. A mí me enorgullece mucho haber colaborado de esa forma.

-Después de tanto tiempo, de una etapa de novillero, los festivales en la portátil, la lucha eterna de querer salir… imagino que lo que ahora estás viviendo a nivel profesional se puede decir que es suerte o justicia.

-yo no creo en la justicia. Creo que es suerte porque he conocido a muchos compañeros que a pesar de tener facultades se han quedado por el camino. Yo tengo la suerte de haber toreado ya con casi todo el escalafón y eso es muy importante. ¿Que no me he planteado de otra forma las cosas porque toreo aquí en mi tierra?, pues oye es que ni una confirmación ni nada porque yo soy consciente de muchas cosas y afortunadamente tengo los pies en el suelo. Ahora mismo tengo un currículo, que ya lo quisieran otros.

-¿A la hora de fastidiar algo, te duele más la ausencia de oportunidad en Huelva o la ausencia de la pasada pinzoniana?.

-La ilusión de torero es la de torear la feria más importante de su tierra. Eso lo tengo ahí. Me muerdo con eso. Pero bueno también entiendo que la empresa tiene que hacer carteles con figuras porque es una feria corta y esa medida me quita la oportunidad de estar ahí. Me duele, pero sin echar reproches a nadie. Pero lo de la pinzoniana me dolió muchísimo porque en unan temporada donde cuajo lo más importante de mi carrera no me lo esperaba de esa forma.