Informático de vocación, por estudios y profesión; pero su condición bien podría ser la de un joven viajero, en el sentido estricto y en el figurado, el que transporta a individuos con el impulso de sus inquietudes.

Ese es el caso de Lope González Vázquez (Huelva, 1980), cartayero emprendedor, que vive desde hace unos meses la aventura de sacar adelante su propio negocio, de lo que comenzó siendo una afición de la niñez.

Innomática es el sueño de dos amigos adentrados en ese mundo desconocido para muchos, de pantallas, cables y teclados, en el que han surgido como solución de confianza y calidad para empresas de la costa occidental.

Aunque la empresa tiene fecha de nacimiento en noviembre pasado, su experiencia de dos años con casos llegados de la mano de amigos, familiares y pymes cercanas les llevó a dar forma a sus trabajos para la instalación de redes y creación de páginas web.

Pero Innomática también materializa el espíritu emprendedor que descubrió Lope durante su estancia en Austria con una beca Erasmus. Aquellos diez meses en Graff le han marcado. Lo admite y se le nota.

Lope cuenta que allí pudo descubrir un mundo nuevo, una sociedad moderna, con un sistema universitario que envidia y un espíritu dinámico entre sus jóvenes que le motivó a no dejar escapar oportunidades a su regreso.

No estaba acostumbrado a salir de Huelva. De hecho reconoce que creía que no hacía falta salir de España para viajar. Ahora su opinión es muy distinta, después de visitar once países centroeuropeos, mientras habla de cómo le impactaron la costa de Croacia, la riqueza social y cultural de Eslovenia o Eslovaquia, y los encantos de Rumanía. En todos ha dejado amigos, con los que confía reunirse muy pronto, quizá este año, mientras espera tener tiempo y dinero para un tour por Estados Unidos, o tal vez escaparse a Turquía, India o Japón.

Lope recomienda la experiencia a otros jóvenes, hasta el punto de que la cree vital para todos los estudiantes, casi obligatoria. Sería una de sus propuestas para reformar un sistema universitario que considera obsoleto y poco acorde con el mercado, desde su experiencia personal.

Este año espera sacar la asignatura que le dará el título de Ingeniería Técnica en Informática de Gestión mientras continúa su formación autodidacta, obsesionado por la renovación constante de conocimientos.

Amante del mar, de El Rompido y El Portil, y los deportes náuticos, Lope también viaja con sosiego desde casa, entre libros y música, y mucho cine, cine español, que defiende a ultranza.