Las obras de rehabilitación del edificio del antiguo cuartel del Paseo Santa Fe en la capital onubense estarán terminadas a final de mayo, según apuntaron desde el Ayuntamiento de Huelva. Tras el temporal Bernard hubo que reforzar la cubierta de la edificación, por lo que se tuvo que solicitar una nueva prórroga, estando previsto que se finalizaran el 6 de mayo, con lo que finalmente se demorarán unas semanas. 

Este viernes retirarán las vallas en el muro de la Iglesia de San Pedro, que también ha sido objeto de una actuación de restauración. En cuanto al edificio anexo, de nueva construcción, en la parte posterior del viejo cuartel, falta por recubrirlo con unas planchas metálicas, que están en proceso de fabricación, una vez que éstas se hayan fabricado se colocarán seguidamente recubriendo la construcción, que albergará el ascensor y maquinaria necesaria para la operatividad del nuevo uso del emblemático edificio.

Por otra parte, las obras de remodelación de la Plaza 2 de Mayo, incluidas también en el mismo proyecto, "están prácticamente terminadas, es cuestión de días". El objetivo de esta intervención era unificar su diseño urbanístico con el Paseo Santa Fe, aportar uniformidad al conjunto, en un punto de la ciudad donde confluyen edificios emblemáticos como el antiguo cuartel y la parroquia de San Pedro. Las obras en el edificio del antiguo cuartel comenzaron en el verano de 2022 en el interior del inmueble con los trabajos de demolición de las construcciones añadidas realizadas a lo largo de los años para los distintos usos que ha tenido la edificación. La actuación en el interior del inmueble se acometió una vez que concluyeron los trabajos arqueológicos. Después de esta primera intervención, se llevó a cabo una labor de consolidación a nivel de cimentación de los doce pilares que sustentan la cubierta.

Se realizaron algunos cambios en el proyecto de consolidación estructural, constructiva y de urbanización circundante de la edificación tras verificarse que el estado de la cimentación era peor que el resultado arrojado por las catas previas, por lo que se optó por un refuerzo en el recalce de las zapatas. Esta modificación influye en las cargas a las que está expuesta la estructura de cubierta, de manera quese decidió reducir el peso de la misma, proponiendo una solución de paneles, que permite adicionalmente optimizar el número y sección de las correas de apoyo.

Posteriormente, en el interior del edificio se rectificó el tratamiento de los revestimientos para recuperar el acabado original y aumentar la capacidad impermeable al agua. También se reconsideró la posición proyectada para las carpinterías de cubiertas, de manera que pueda reconocerse la lectura del esqueleto estructural de forma unitaria, con una mayor visibilidad e iluminación natural, y se facilite la ejecución de los encuentros con los pórticos.

En cuanto a las fachadas, éstas se recuperaron mediante un tratamiento artesanal, consistente en la limpieza del ladrillo visto, su reposición allí donde fue necesario con piezas expresamente fabricadas para conseguir la plantilla del ladrillo original y su color, el mismo tratamiento que se le ha dado al muro de la Iglesia de San Pedro.La actuación llevada a cabo tanto en el emblemático edificio como en el muro de la Iglesia de San Pedro y en la Plaza 2 de Mayo supone una inversión de 3.326.793, 26 euros (subvencionados al 60% dentro del Programa 1’5% Cultural del Ministerio de Fomento).