Huelva

El mismo coche se puede llegar a vender hasta dos veces en un solo día

  • La reventa de vehículos es una práctica más habitual entre extranjeros · Buscan ingresos ante la reducción de jornales

La singular idiosincrasia de la provincia de Huelva y la coyuntura social en que se encuentra sumergida hace que el trabajo en la Jefatura Provincial de Huelva tenga un carácter especial. Desde hace meses, viene siendo habitual que un mismo vehículo cambie de titular más a menudo de lo que puede considerarse normal cuando se trata de inmigrantes.

De hecho, el mismo coche se ha llegado a vender hasta cuatro veces en un solo mes e incluso dos veces en un día, según se apunta desde el sindicato CCOO.

El efecto de una población de inmigrantes en "constante incremento y cada vez con menos contratos en origen", se ha convertido en un claro motivo que les empuja a encontrar cualquier medio de subsistencia y "negociando con coches de segunda mano, vendiéndolos a bajo precio, consiguen con pequeños incrementos en cada venta obtener lo que equivaldría a algunos días de trabajo en las labores agrícolas", explica el delegado de personal del Ministerio de Interior del sindicato, Federico Soubier.

Muchos de esos vehículos se venden en los países de procedencia, donde resultaría difícil conseguirlos. De hecho, la mayor parte van a Marruecos, Senegal o países de la Europa del Este, sobre todo Rumanía, para lo cual desde la Jefatura Provincial de Tráfico se gestionan las denominadas bajas por exportación o por tránsito comunitario.

Una de las dificultades con las que se encuentra la jefatura llega a la hora de finalizar el trámite de la entrega de carnet, bien por su obtención tras examen (curiosamente son numerosas las ocasiones en las que se el número de aspirantes extranjeros supera al de nacionales) o por el canje al nacional de los inmigrantes, dado que éstos "cambian continuamente de domicilio" y la Dirección General de Tráfico los envía directamente desde Madrid. Es que es habitual que, mientras tienen empleo, se den esos cambios constantes, en función de las fincas en las que viven. Esta situación provoca, en más de una ocasión, que no puedan recibir la documentación original en el primer envío, debiendo realizarse la gestión en "reiteradas ocasiones".

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