El Paseo de la Ría terminaba en el Cargadero de la compañía minera Rio Tinto . O comenzaba, según se mire. Lo cierto es que la Autoridad Portuaria de Huelva se encuentra inmersa en uno de los objetivos más inmediatos, como es la de completar su trazado y enlazarlo con el plan integral que tiene pensado para recuperar toda la fachada marítima de la ciudad. Después del derribo del edificio Crustamar, la superficie quedaba limpia para continuar con lo que se ha convertido en una de sus prioridades, la de continuar esa vía que se ha convertido en uno de los atractivos de Huelva y una de sus mejores tarjetas de presentación.

El adecentamiento de la zona del Cargadero que se levanta sobre el río Odiel, a la espera de la reformulación completa de la avenida Francisco Montenegro para la que tanto el Ayuntamiento, como el Puerto y la propia industria tienen en mente una recuperación más profunda para la ciudad, lo que conllevaría el desvío del tráfico pesado por detrás de las fábricas actuales, ese entorno del Muelle es el siguiente paso para concretar. Mientras siguen las obras de la zona de ocio en las inmediaciones del Puente Sifón, una vez finalizadas las que están actualmente en marcha, el Paseo de la Ría tendrá una continuidad hasta allí. Faltaría entonces la remodelación de la rotonda -que ahora no lo es tal- de acceso a la avenida de la Ría, algo que se completará una vez finalicen las obras del carril bici que en la actualidad se llevan a cabo en la zona.

A pesar de que los trabajos de remodelación de los saneamientos ya habían sido llevados a cabo con anterioridad en previsión de que los mismos afectaran a los plazos para la obra actualmente en curso, lo que más ha llamado la atención a quienes se acercan a contemplar el desarrollo de las obras, especialmente desde la propia estructura del Muelle del Tinto, es la presencia de enormes tuberías, ahora sin uso, que han sido retiradas por las máquinas excavadoras que trabajan en el lugar.

Fue la empresa Seranco SA, la que se hizo con la adjudicación del contrato el 29 de septiembre por un importe de 2,1 millones de euros. En apenas cuatro meses, los que se detallan en la adjudicación, concluirán con la urbanización de los 130 metros (unos 4.300 metros cuadrados) que restan para terminar el Paseo de la Ría, inaugurado en el verano del año pasado, en el entorno del Cargadero con un diseño de obras que, tal y como adelantó Huelva Información el pasado 9 de julio, deberá respetar los requerimientos del proyecto de Martínez- Lapeña-Torres Arquitectos, así como que se trata de los trabajos sobre una estructura declarada como Bien de Interés Cultural. Por lo tanto será el próximo mes de marzo cuando, si todo transcurre con los plazos que se tienen previstos y no se sufre retraso alguno, los onubenses puedan disfrutar del nuevo Paseo de la Ría con una longitud mayor.

El pavimento que Seranco utilizará en toda la superficie tiene continuidad con el resto del Paseo de la Ría, es decir, unos adoquines en forma de rombo de hormigón blanco. Además, se procederá a la instalación de bancos, sillas, fuentes y papeleras junto con una barandilla formada a base de montantes equidistantes cada dos metros, de "fundición galvanizado en caliente" y "acabado en esmalte blanco", también para no romper la continuidad de lo instalado en el resto del Paseo.

El nuevo espacio será iluminado por farolas con báculos de siete metros de altura y un vuelo de tres metros de acero galvanizado y luminarias con lámparas de vapor de mercurio con halógenos. Las especies que se plantarán en los parterres son whasingtonias robustas y trachycarpus fortunei, que serán instaladas en una serie de praderas con tepes de cynodon, agropyrun y agrostis, similares a las actuales del Paseo. El riego se desarrollará mediante una instalación de un sistema por aspersión.