industria pesquera | una empresa cien por cien onubense

Marisco made in Huelva

  • Dimarosa, filial de Mariscos Rodríguez, factura 270 millones de euros al año

  • Cuenta con una flota de 45 barcos y un mercante

Marisco made in Huelva

Marisco made in Huelva

La provincia de Huelva es pesquera por tradición. La gamba es uno de sus recursos naturales más conocidos y valorados, todo su marisco lo es. Se consume en toda España, donde goza de una gran reputación. La flota pesquera y mariscadora de la provincia onubense también cuenta con un gran prestigio por su volumen y sus apreciadas capturas. En plena época navideña los barcos se afanan por hacerse con los mejores productos pesqueros para que puedan llegar a la mesa de los hogares españoles.

En ello trabaja todo el año, y especialmente estos días, el grupo empresarial onubense Mariscos Rodríguez a través de sus distribuidora Dimarosa, que se ha convertido desde hace casi diez años es el interproveedor de la prestigiosa compañía de supermercados Mercadona.

Mariscos Rodríguez es una empresa familiar que se dedica a la importación, exportación, comercialización y distribución de mariscos congelados pescados en alta mar.

Para ello cuenta con una flota de 45 barcos que faena en distintos caladeros de África y Suramérica, en concreto en Marruecos, Angola, Congo, Senegal y Argentina, a lo que se suma un barco mercante. Además la compañía tiene una delegación en Escocia y otra en China, con plantas en las que procesa la pesca que adquiere a proveedores que pescan en esas aguas.

Todo comenzó con la captura de la chirla. Fue al inicio de los años setenta cuando se constituyó la empresa matriz y se produjo el desarrollo del grupo, con la firma de acuerdos bilaterales con terceros países y adquiriendo progresivamente una flota de buques congeladores para la pesca de marisco. En 1982 se creó Distribuidora Mariscos Rodríguez SA (Dimarosa).

Producto de su expansión y su consolidación en el mercado, la compañía facturó el pasado año 270 millones de euros, de los cuales 139 millones (casi la mitad del total) correspondieron a la comercialización realizada a Mercadona. El resto fue venta directa en los mercados centrales de Barcelona, Madrid, Valencia, Alicante, Zaragoza, Málaga y Sevilla, donde tiene delegaciones.

Además de la geografía nacional, cuenta con varias sedes situadas en Argentina, China y Escocia, de las que importa productos de la zona para ofrecer una mayor variedad de los caladeros más importantes del mundo.

En total fueron 32 millones kilos de marisco los comerciales en 2015, entre gamba blanca y alistada, langostinos, carabineros, cigalas, patas, bocas y cuerpos de cangrejos. La campaña de Navidad representa cada año el 30% de la facturación del grupo.

En esta ocasión, espera de nuevo obtener buenos resultados mientras se preparan ya para la venta masiva de marisco que se produce por estas fechas, explica el gerente de Dimarosa, Jacinto Rodríguez

El trabajo se realiza en las nuevas instalaciones del Puerto Exterior, donde la empresa se trasladó en 2011 y sentó su nueva sede. Allí se produce la recepción y descarga de la mercancía, la clasificación de los productos, la realización de la analítica, la comprobación de la calidad y finalmente el envío a clientes. Cada 45 o 50 días llega al Puerto de Huelva el mercante con el marisco capturado en África. Realiza al año entre 6 y 7 viajes, dependiendo de las paradas biológicas de los caladeros donde se realizan las capturas. Desde Argentina, el marisco llega en contenedores de línea regular. Buena parte del marisco que llega a las instalaciones del Puerto Exterior va a parar a Mercadona tras la cocción, filtrado y estuchado del marisco.

La inversión realizada en la nueve sede asciende hasta la fecha a 35 millones de euros. La planta cuenta con cámaras automatizadas y salas de elaboración que sirven para almacenar el producto y elaborarlo según las directrices marcadas por el mercado, tanto en lo que se refiere al producto como a los envases.

La superficie total asciende a 43.297 metros cuadrados. Las instalaciones incluyen la cámara automática de congelación con una capacidad de más de 5.000 palés y 21.000 cajas, además de una cámara manual de congelación que puede almacenar hasta 700 palés. La automatización del proceso es tal que la cadena del frío nunca se rompe. La planta de elaboración cuenta con salas independientes de cocción, procesado y envasado en las que trabajan unas 80 personas, dependiendo de la campaña, además de la plantilla fija. Sumando todas las delegaciones y empresas, el grupo tiene un total de 917 empleados. Las instalaciones cuentan también con una sala en la que se reparan las redes.

La alianza con Mercadona ha sido clave en la transformación que ha experimentado Mariscos Rodríguez. También ha supuesto una importante inversión en innovación para lograr los estándares de calidad que exige no sólo esta compañía española de supermercados, sino el resto de los clientes. Impera una nueva filosofía, más cercana al consumidor y en la que la calidad y el control están presentes en todo el proceso.

Según Jacinto Rodríguez, el acuerdo con Mercadona fue todo un reto por lo que significa ser interproveedor de esta empresa y las exigencias que conlleva: un compromiso con la seguridad alimentaria y con la calidad. Finalmente se produjo el salto y el cambio en la forma de proceder con sus productos en Dimarosa desde el mismo momento de las capturas en los barcos hasta que el marisco llega a los hogares. Además se trata de optimizar los costes adaptándose a la demanda del consumidor y presentar nuevos envases.

La apuesta por la transformación y modernización de Mariscos Rodríguez no ha concluido. La empresa proyecta ampliar las instalaciones de Dimarosa y trasladarse allí definitivamente en mayo o junio, tras una inversión de 5 millones de euros.

Entonces abandonará definitivamente las dependencias que tiene en el Paseo de las Palmeras. Allí se realiza aún la subasta a los minoristas. Después será en las dependencias del Puerto Exterior, en una sala automatizada.

Mientras, desde hace años, Mercadona mantiene el compromiso de ser viable y utilizar materia prima nacional. Esta apuesta se ha seguido reforzando en 2015, año en el que adquirió 493 millones más que en el ejercicio anterior en productos cultivados, pescados y elaborado en España.

Las instalaciones centrales de Dimarosa están situadas en el Puerto Exterior.

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