La zona de la Vaguada de Zumalabe en el Parque Moret se llenó ayer de las voces y risas de niños y del sonido de las palas en la tierra. Integrantes del Grupo Scout Orion de Huelva, junto a familiares y a representantes de la Asociación Arba y del Aula de la Naturaleza de este espacio, participaron ayer en una actividad que reúne múltiples beneficios y que consistió en la plantación de distintas especies de árboles y arbustos en esta zona.

Junto a la repercusión positiva que, sin duda, este tipo de acciones tienen en la naturaleza, los organizadores destacaban, sobre todo, que estas iniciativas contribuyen a desarrollar una mayor conciencia ambiental y de respeto por la naturaleza entre los más pequeños. Eso incidirá, según indicaron, en que en un futuro estén más sensibilizados con la necesidad de cuidar y proteger nuestro entorno natural.

Los pequeños plantan especies como palmitos, encinas, madroños o pinos

Así lo recalcaba ayer el representante de la Asociación de la Reforestación del Bosque Autóctono (Arba) en Huelva, José Carlos Mélida. Él se encarga voluntariamente del vivero que existe en el Parque Moret y, gracias a ello, puede suministrar de forma gratuita árboles para este tipo de plantaciones. Este año, sólo con sus medios y sin subvenciones, va a cerrarlo con numerosas acciones de este tipo y la participación de más de 700 niños. Según indicó, los pequeños suelen disfrutar muchísimo con este tipo de actividades y se preocupan luego de si el árbol está creciendo bien y de qué cuidados necesita. "Por no hablar de los beneficios que, en sí, tiene plantar árboles en cuanto a que aportan vida, oxígeno o belleza, entre otras cosas", señaló.

Un mensaje muy similar lanzaba la coordinadora del Grupo Scout Orion, Rocío Sánchez, quien explicó que todos los años intentan hacer una actividad de este tipo y que ya en el campamento que realizaron en Navidad, que se desarrolló en Berrocal, hicieron una pequeña reforestación. "En esta ocasión queríamos hacer algo en un sitio que quedara más cercano, para que los niños también puedan hacer un seguimiento de lo que plantan", subrayó. Y es que los scouts son amantes de la naturaleza, por lo que quieren propiciar que los más pequeños tengan la oportunidad de participar en este tipo de iniciativas, que "sean ellos los que planten y puedan seguir la evolución del árbol", precisó la coordinadora del grupo.

Para el presidente de la Asociación Scouts Católicos de Huelva, Francisco Soler, es fundamental que los niños tomen conciencia de que "lo que nos da la vida es la naturaleza y que tenemos que cuidarla y participar activamente en su mantenimiento". Junto a esto, también incidió en el valor que tienen este tipo de iniciativas para desarrollar el respeto a los espacios naturales, ya sea éste en el que han realizado la plantación o cualquier otro.

Fue un día intenso para los jóvenes integrantes del grupo scout. No sólo tuvieron que cavar los hoyos para plantar los árboles, sino que también aprendieron qué tipo de especies son más aptas para unas zonas u otras o qué se iba a conseguir con ellas. Concretamente, según especificó Luis Vidosa, del Aula de la Naturaleza del Parque Moret, plantaron palmitos, retama blanca, madroños, encinas y pinos piñoneros. Unas, como las encinas, se ubicaron en la zona de solana, a la que se adaptan muy bien y que es un espacio que está más deteriorado. Otras, como los pinos piñoneros o las retamas, se plantaron en la ladera, con el objetivo de que quede más cubierta de vegetación y se frene así la erosión. Vidosa señaló que ésta es una de las últimas plantaciones que realizarán este año, puesto que ya se aproximan los meses de calor. La última será este próximo miércoles en la Fuente Vieja, en la que, por ser zona de ribera, se plantarán especies como chopos, frenos o álamos.