Economía

Alemania se resiste a entregar Opel a Fiat a precio de saldo

  • La marca automovilística italiana ya ha avanzado que no cerrará ninguna planta alemana.

El Gobierno alemán no está dispuesto a entregar Opel a precio de saldo a Fiat, según ha dejado claro la coalición de la canciller Angela Merkel ante la visita del lunes del consejero delegado del consorcio italiano, Sergio Marchionne.

El ministro de Economía, Karl-Theodor zu Guttenberg, de la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), y el de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier del Partido Socialdemócrata (SPD), pretenden imponer duras condiciones a los planes de absorción de Fiat.

"Todo interesado en Opel debe presentar un concepto sostenible. No nos lanzaremos a aventuras a costa del contribuyente. El concepto debe dejar claro que las plantas europeas de Opel que se mantengan deben tener asegurado su futuro a largo plazo", afirma Guttenberg, en declaraciones al dominical Bild am Sonntag.

El titular de Economía, que esta semana se reunió con directivos del otro interesado, el consorcio austríaco-canadiense Magna, rechaza una participación estatal en Opel por tiempo indefinido.

"Para mi sigue sin ser imaginable una participación estatal en Opel. Como máximo puede haber avales sobre créditos por un tiempo definido", afirma Guttenberg.

Por parte de Steinmeier, candidato del SPD a la cancillería en las elecciones de septiembre, se pretende imponer a los italianos un catálogo de 14 puntos, informa el semanario Der Spiegel.

El SPD recela, al igual que el comité de empresa, del interés de Fiat en Opel y teme una destrucción masiva de puestos de trabajo.

El catálogo que pretende imponer establece como líneas prioritarias garantías para la plantilla y las plantas alemanas.

Fuera de este objetivo legítimo, apunta Der Spiegel, hay un juego de intereses menos claros en los que intervendría el ex canciller Gerhard Schröder, con gran influencia sobre Steinmeier, que fue ministro de su gobierno y ahora continuador de su línea.

Schröder favorece a Magna como inversor. El jefe de ese consorcio, Siegfried Wolf, estuvo en su fiesta de 65 cumpleaños, celebrada hace unas semanas y cuenta con su respaldo.

Según Guttenberg, Fiat y Magna se excluyen mutuamente como posibles inversores de Opel, ya que sus conceptos son demasiado distintos como para que puedan entrar los dos en la filial de GM.

Con este trasfondo presentará Marchionne su plan a Guttenberg, Steinmeier y al jefe del comité de empresa, Klaus Franz. Hasta ahora, Fiat ha avanzado que no cerrará ninguna planta alemana.

El consejero delegado llegará a Berlín apenas cinco días después de haber suscrito su alianza con el estadounidense Chrysler, que se declaró esta semana en quiebra y que, a través del acuerdo con los italianos, aspira a salir de la suspensión de pagos en 30 ó 60 días.

El acuerdo lo anunció el presidente de EEUU, Barack Obama, quien considera responsables a un grupo de acreedores de Chrysler de provocar la quiebra de la compañía al negarse a aceptar la oferta realizada por el Gobierno para canjear la deuda.

Opel se encuentra en una crisis generada, en parte, por los problemas de la casa matriz y desde hace meses se busca una fórmula para su salvación. Berlín pide que Opel se independice de GM para garantizar que las posibles ayudas públicas no terminen desapareciendo en las arcas de la casa matriz.

Guttenberg aprovechó su encuentro con Magna para lamentar de nuevo que GM no haya presentado aún las cifras necesarias para formular un proyecto de rescate con un inversor privado.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios