De nuevo el TMD Aljaraque consigue una merecida victoria donde el colegiado Muñoz Ballesteros se quiso hacer el triste protagonista. Lo hizo primero con una injusta expulsión de Camilo en una jugada que sólo fue falta si lo fue y después suspendiendo el partido durante 25 minutos hasta que no se presentaron las fuerzas públicas. El partido se desarrollaba con dos equipos jugándose la vida y ante todo totalmente deportivo pero el colegiado quiso poner la nota de color.

El encuentro comenzó de la mejor forma posible para el Aljaraque ya que en el minuto 1 conseguía el 1-0. Tras una buena jugada del centro del campo, el balón le llega a Alberto en banda derecha, que centra para que Juanjo al borde del área controle con el pecho y de fenomenal disparo bata al portero Lobo.

La segunda ocasión fue de nuevo por Juanjo en el minuto 8. Se va por rapidez de los defensas del Trigueros pero su tiro sale rozando el poste. Seguía y seguía dominando el Aljaraque y fruto de ello vino el 2-0. De nuevo, fue en un jugada por banda derecha, centro del Alberto e Iñaki aparece en el punto de penalti fusilando a Lobo.

Tras esta jugada vino la ya reseñada y polémica jugada. Un balón desde saque de banda, dos jugadores que saltan y el árbitro ante la incredulidad de aficionados y jugadores, expulsa al local Camilo. El Aljaraque, con inferioridad numérica, recompone el sistema con 70 minutos por delante y pasa de jugar un 4-4-2 a un sistema 4-4-1.

Durante todo el partido el Trigueros llevaba el peso del mismo pero el Aljaraque ponía las claras ocasiones. Hasta tres mano a mano con el portero visitante tuvo Sebas pero unas veces por acierto del guardamenta y otras por desacierto del atacante el marcador no se movió.

El Trigueros sólo se acerbcaba a la meta de Ricardo en jugadas a balón parado y éste, muy acertado toda la tarde, las resolvía sin problemas.

Cuando más intentaba atacar el Trigueros, llegó el 3-0 aljaraqueño: Contragolpe local, Jose se regatea a dos defensas y se planta solo ante Lobo, al que bate por bajo.

Ha sido un merecido resultado para los locales, que dejaron muestra de su gran trabajo tanto táctico como físico, quitándole el protagonismo a un mal arbitraje de Muñoz Ballesteros, que no tuvo su día.