Contenido en los gestos, eufórico con la palabra. "Es un día histórico en el baloncesto femenino español y europeo. Que un club que hace tres años estaba en la Liga Femenina-2, y que hace seis competía en Primera Nacional, gane la Copa de la Reina ante todo un Perfumerías Avenida, sencillamente, es una gesta", proclama Gabriel Carrasco desde la improvisada zona de prensa del torneo, situada en un frontón aledaño al Pabellón José Antonio Gasca.

El técnico del Conquero Huelva Wagen pone en valor que "hemos hecho un gran esfuerzo y sacrificio por este título. Somos un club modesto y humilde en lo económico, pero rico en ilusión y sentimientos. La Copa de la Reina la hemos ganado por esfuerzo y fe. Nuestras jugadoras se sienten muy identificadas con el club y la afición, a la que también debemos mucho. Algunas veces se hace justicia en una pista de baloncesto", señala.

Sabedor de que el club tiene en la conquista de la Copa de la Reina un escaparate inmejorable para lograr los apoyos que necesita para sanear sus finanzas, Carrasco indica que "tenemos las puertas abiertas para todo aquel que quiera hacerse la foto, pero también es el momento de retratarse. Lo único que pido es respeto y justicia".

En este sentido, y en relación a las polémicas del último mes, el preparador onubense denuncia que "es muy fácil mal informar diciendo que nuestra plantilla vale 300.000 euros -es el presupuesto de la presente temporada- y obviar que debemos pagar trece desplazamientos muy lejanos o la parte que dedicamos a los gastos federativos".

"Además -insiste-, casi todas nuestras jugadoras estaban libres en el mercado en el mes de agosto. Que alguien haga cuentas y si los dos entrenadores tenemos que conducir dos furgonetas miles de kilómetros por todo el país, por algo será", reflexiona en voz alta.

Por esas razones considera que la supervivencia del Conquero no estaba en juego en la Copa de la Reina, porque "la supervivencia está en juego desde el año 2006, cuando teníamos 6.000 euros de subvención, un equipo sénior en Primera Nacional con sólo seis jugadoras y tres equipos de cantera. Desde entonces, no he visto un solo día en que no esté en juego la supervivencia del club. Estuviéramos en una u otra categoría, siempre hemos tenido un presupuesto exiguo, muchas penalidades y una economía de guerra. Por eso hay que valorar como se merece este título", recalca.

Un título que hubiera sido el tercero consecutivo para el Perfumerías Avenida en caso de lograr la victoria. No fue así y su entrenador Alberto Miranda, no duda en admitir que "no hemos estado al nivel. Veníamos de una semifinal muy dura ante Girona y Conquero tenía muy claro cual era la forma de ganarnos. Todo ha ido a favor de ellos. Estábamos muy cansados, no hemos sabido jugar en transición y nuestra circulación de balón ha sido inexistente", se lamenta.

Para el técnico perdedor "Conquero ha llegado con más energía al final del partido y se merecen esta Copa de la Reina por lo que han luchado y nosotros no".