Alrededor de 300 personas se dieron cita en los aledaños del Parador Nacional de Mazagón esperando la llegada del Real Madrid, que hoy se ve las caras con el Recreativo de Huelva a partir de las 20.00 horas. Seguidores del club blanco -y otros que no lo eran también- se agolparon en la entrada del parking del Parador en espera de sus ídolos, que alrededor de las nueve y cuarto de la noche llegaron al lugar donde montaron su cuartel general en espera del encuentro con los albiazules.

Desde las siete de la tarde se empezó a ver movimiento en los alrededores, y eso que la llegada del club blanco no estaba prevista antes de las nueve. Trompetas y bufandas se hicieron notar desde el primer momento de la espera que se hizo tediosa según se iban conociendo las novedades. Y es que hasta pasadas las siete y media de la tarde no salió el equipo merengue del aeropuerto de Sevilla, lo que hizo aún más larga la espera de los aficionados.

En torno a las nueve y cuarto llegó el autobús del equipo. Cinco minutos antes llegaron los directivos del cuadro madridista, con el onubense Amador Suárez -vicepresidente del Real Madrid- a la cabeza. Los aficionados que en una cifra ya superior a los 300 estaban a la entrada del aparcamiento del Parador por fin pudieron ver a sus ídolos, aunque fueran a través de las ventanas de un autocar que, eso sí, circulaba muy despacio ante la aglomeración de personas y por los muchos coches aparcados en el arcen de la carretera que conduce al Parador. Los jugadores del Real Madrid pasaron directamente a sus habitaciones, para poco después ir desfilando hacia el comedor pasadas las diez.

Muchos de los aficionados del Real Madrid que estaban en la puerta esperaban el acto de la firma de autógrafo de dos jugadores del club, que fue después de la cena, lo que hizo aún más larga la espera de aquellos que desde primera hora de la tarde estaban aguardando ese momento.