Nombres ilustres, rostros conocidos, apuestas de futuro e incógnitas que nunca terminaron de fraguar, la profunda metamorfosis producida en el seno recreativista se tradujo en un irregular impacto en quienes abandonaron el Decano. El Recreativo de Huelva, un equipo que marcha décimo en liga con 27 puntos, nada o poco tiene que ver con el de la pasada campaña por estas fechas. Y es que es una época de cambios en el seno albiazul y claro ejemplo de esta metamorfosis lo reflejan las 21 bajas que ha presentado el club en este año que pronto llegará a su fin.

De esos 21 jugadores -22 si Álvaro Cervera queda incluido en la lista de profesionales que abandonó la nómina del club- que dejaron la disciplina recreativista sólo Fidel puede sentirte orgulloso y satisfecho. Es el único que mejoró al emigrar de su tierra con destino a Elche. Tanto es así que el jugador formado en la cantera del Decano, equipo con el debutó en Segunda División en la 2009/2010, se ha convertido en uno de los jugadores más destacados del conjunto ilicitano con el que lidera la Segunda División. Además, el jugador onubense es fijo para Bordalás y es el tercer máximo goleador de su equipo con 4 goles. En el cuadro alicantino explotó como no lo había hecho en Huelva a pesar de las oportunidades, lo que le ha permitido dar un salto de calidad y ser hoy pieza clave de cara a la lucha por el ascenso de su club.

En esta línea ascendente y salvando la distancias con Fidel, se encuentra Javi Álamo, en las filas del Zaragoza. El ariete canario presenta la mejora del ascenso de categoría pues el conjunto maño es equipo de Primera División. Sin embargo, Álamo no está contando mucho para Manolo Jiménez y sólo jugó cuatro partidos en la Liga, todos como suplente, y uno en Copa, este sí desde el inicio. Así, el que fuera uno de los más destacados en el Recreativo la pasada campaña y objetivo de deseo de muchos clubes de la máxima categoría de la Liga española, cierra la primera vuelta sin haber marcado ni un gol y con la ausencia de buenas sensaciones en sus intervenciones.

Siguiendo con la primera línea del Decano en la pasada campaña, Kike Tortosa, que salió en el pasado mercado invernal con destino al Alavés, juega esta temporada en el Alcoyano, conjunto que marcha cuarto en el grupo tercero de la Segunda División B, donde apenas ha destacado. Junto a Tortosa, Manu Micó, Héctor Font y Soares también se desvincularon del conjunto albiazul en el pasado mercado invernal. El primero, se fue de Huelva tal y como llegó sin pena ni gloria, probó sin suerte durante tres semanas en el Alavés y se encuentra sin equipo. El segundo recaló en las filas del Cartagena para jugar la mitad de la vuelta que faltaba de la pasada campaña y poner rumbo al Lugo este verano, donde ha disputado 13 partidos y ha marcado un gol, siendo uno de los jugadores de referencia del conjunto gallego en su llegada a la categoría de plata. El tercero, Soares, pasó desapercibido y el Oporto sigue cediéndolo de equipo en equipo sin que termine de brillar.

La línea de ataque fue sin duda la más afectada por los recortes. Entre ellos, Sergi Enrich, delantero formado en los escalafones inferiores del Mallorca, y que llegó, junto con Ximo Navarro, en calidad de cedido. Enrich completó una temporada irregular, con luces y sombras y con algún destello de calidad que en algún momento llegó a ilusionar a la afición albiazul, pero que no llegó a nada. Hoy juega cedido en el Alcorcón, dónde comparte vestuario con otro de sus compañeros en Huelva, el portero Manu Fernández, que se fue en verano después de preferir no jugar el tramo final del campeonato. Ximo se marchó en invierno al Córdoba y completó una segunda vuelta destacada de la mano de Paco Jémez. El actual técnico del Rayo Vallecano supo sacarle todo el jugo que Cervera no consiguió exprimir y en la actualidad es utilizado con frecuencia por Joaquín Caparrós en el Mallorca, a pesar de algunos capítulos extradeportivos.

Uno de los grandes protagonistas de la pasada campaña fue el preparador Álvaro Cervera. Dejó el Recre para subir un escalón y posteriormente tuvo que bajar dos. El ex técnico albiazul está al mando del Tenerife y, de momento, las cosas no le van del toda mal pues su equipo está en la cima de la clasificación del grupo primero de la categoría de bronce de la liga española.

Asen, Kepa, Danilo Peinado y Pablo Sánchez completan el capítulo de delanteros. El primero, debido a su edad, no encontró acomodo en el fútbol profesional y forma parte del Rayo Majadahonda, en la Tercera División de Madrid. El segundo, un anhelo albiazul desde hace casi una década, nunca rindió al cien por cien. Tras rescindir con el club, el pasado verano rumbo al Guadalajara, donde es baja para cuatro o cinco meses por la fractura de la tibia. Peinado aportó poco al equipo y en verano se marchó al Bella Vista. El caso de Pablo Sánchez fue diferente pues el rendimiento del gaditano en Huelva fue notable con una pasada campaña para enmarcar. De ahí que su marcha sorprendiese.

Tras una larga negociación con la entidad en la que el gaditano quiso esperar pendiente de un ascenso del Cádiz, el Decano optó por retirar su propuesta. Tras esto, a pesar del interés del Almería, decidió marcharse al equipo que lo vio crecer como futbolista, el Cádiz, donde comparte experiencias con otro viejo conocido de la afición albiazul: Juan Villar. El de Cortegana se formó en la cantera del Decano y en la 2009/2010 brilló. Sin embargo, la pasada campaña su rendimiento bajó muchos enteros y dio un bajón considerable. Ni Cervera ni Juanma después, lo situaban como imprescindible y participaba intermitentemente con el equipo. Por eso, con el cierre de la temporada, el que también fuera jugador del San Roque abandonó el club de su vida e hizo las maletas con dirección a la tacita de plata.

Allí, junto con Pablo Sánchez, formó la delantera principal del equipo amarillo en las primeras jornadas pese a que en el tramo final de la primera vuelta se ha visto arrastrado por los malos resultados cadistas. También milita en el Carranza Albentosa, jugador que llegó procedente del San Roque de Lepe, pero que al no convencer a Sergi ni se estrenó con la elástica albiazul.

Otro de los más perjudicados por la crisis, que como a todo, también afecta al fútbol, es Álex Quillo. El linense, formado en la cantera del Atlético de Madrid, equipo con el que llegó a debutar en Copa del Rey, no convenció a ninguno de los entrenadores que pasaron por Huelva durante las dos temporadas que formó parte de las filas del Recre. Actualmente está entrenando con la Balona a la espera de ofertas.

La salida que más sorprendió fue la de Aitor Tornavaca, capitán y miembro de la plantilla durante ocho temporadas. El jugador vasco era un ídolo para la afición albiazul, que esperaba que el 'eterno' capitán colgase las botas en el Nuevo Colombino. No fue así. Aitor rescindió el contrato que le unía al Recreativo y fichó por el Avilés, después de cerrar su última temporada de albiazul con 32 partidos y dos goles. Junto a él, en la zaga también abandonaron la disciplina recreativista Borda y Zamora. Uno rumbo a Chipre, donde ha marcado 2 goles con el Apoel en los 10 partidos que ha disputado y el otro, sin equipo, en el paro después de pasar inadvertido por el Nuevo Colombino.

El último en hacer las maletas y abandonar el Decano fue Andrés Lamas, que se marcha después de casi dos años lesionado. Sergi decidió prescindir de él pese a que se encontraba en la fase final de la recuperación porque no entraba en sus planes deportivos. En consecuencia el club decidió romper la relación contractual que le unía al uruguayo.

Tantas salidas tuvieron sus consiguientes llegadas. Fichajes de jugadores, en su mayoría jóvenes y con ganas de triunfar, que tratan esta temporada de llevar al Recreativo de Huelva a lo más alto de la clasificación y renovar la ilusión de una afición con ganas de disfrutar.