El Bilbao Básket arrolló al Laboral Kutxa Baskonia en Miribilla (93-75) en un derbi vasco intenso, igualado en la primera mitad, claramente dominado por los locales tras el descanso y que terminó con una masiva y desagradable trifulca entre los dos equipos, ya con todo decidido, a punto de que finalizase el choque.

No habían ocurrido incidencias extradeportivas reseñables hasta que a 7,2 segundos del final, con 91-75, una falta de Shengelia a Todorovic en una entrada a canasta enfureció al joven serbio, que se fue a por el georgiano abriendo las hostilidades a las que se sumaron los dos equipos en pleno. Unos para ayudar y otros echando más leña al fuego.

Consecuencia de la tángana, los árbitros descalificaron a Shengelia y obligaron a todos los miembros de los banquillos, a excepción de los entrenadores, a abandonar la cancha de juego. Un triste final para un intenso partido en el que los de Sito Alonso defendieron su cuarta plaza en la tabla clasificatoria de la Liga Endesa y además superaron al Baskonia en el diferencial de puntos entre ambos equipos en los enfrentamientos directos.

El equipo local basó su triunfo, tan incontestable como disfrutado y celebrado por la afición de Miribilla, en la labor colectiva, un trabajo coral en el que, no obstante, sobresalió como la pareja interior Hervelle-Marko Todorovic (26 puntos, 11 rebotes, 7 asistencias, 2 tapones y 41 de valoración entre ambos).

El Baskonia bastante tuvo con aguantar hasta el descanso el alto ritmo impuesto por el Bilbao, menos de 48 horas después de su brillante e importante triunfo de Euroliga en Estambul contra el Anadolu Efes. En el primer tiempoel resultado era 40-34, pero a vuelta de los vestuarios se desataron los de Sito Alonso con un parcial de 27-15 que finiquitó el partido al término del tercer cuarto (67-49). En el último acto, antes de la lamentable tángana, las única duda eran saber cuál sería la ventaja local al final.