La Dirección General de la Sostenibilidad de la Costa y el Mar del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha iniciado los trabajos de aportación de 10.000 metros cúbicos de arena a la playa de Matalascañas para contribuir a su regeneración.

El subdelegado del Gobierno en Huelva, Enrique Pérez Viguera, informó ayer del comienzo de estas tareas y precisó que tienen un coste de 282.414 euros y un plazo de ejecución de dos meses.

Pérez Viguera recordó que esta aportación se iban a realizar antes del verano, si bien el Ayuntamiento de Almonte, del que depende el núcleo costero de Matalascañas y su playa, solicitó su retraso debido al inicio adelantado de la temporada de baño.

Se trata de una de las actuaciones prioritarias recogidas en la estrategia para la protección de la costa de Huelva, elaborada por la Dirección General de la Sostenibilidad de la Costa, basada en un estudio integral del litoral, que es la primera vez que se realiza, para proponer soluciones definitivas al problema histórico de la erosión.

Su desarrollo supone que a lo largo de los próximos dos meses en esta playa onubense descarguen más de 1.000 camiones con arena.

Pérez Viguera explicó la adjudicación del contrato de servicios para la redacción del proyecto Aportación de arenas y mejora de los dispositivos de retención de la playa de Matalascañas por un importe de 62.920 euros.

Este proyecto, también incluido en el estudio del litoral, está previsto que se formalice, si no hay ningún imprevisto, en los próximos días y tendrá un plazo de ejecución de 10 meses.

La empresa Tragsa ejecuta los trabajos con arena de procedencia terrestre. Concretamente, arena de Mazagón -de zona de dunas interiores- que cuando fue extraída se depositó en su cantera de Gibraleón y que ahora se han utilizado para esta actuación. Se trata de arena de playa compatible con la que hay en Matalascañas, según la Subdelegación del Gobierno.

Los 10.000 metros cúbicos se van a depositar formando un cinturón de 400 metros de largo pegado al Paseo Marítimo del enclave costero, como si fuese una duna. De esta forma, sí hay temporales, como suele ocurrir todos los inviernos y el mar llega donde está la arena acopiada, será la propia dinámica del litoral la que extiende la arena en la playa. En caso de que no se registren fuertes temporales y el mar no avance hasta la zona de acopio, en fechas próximas a la celebración de la romería del Rocío se llevarán a cabo trabajos de reperfilados de arena para extenderla, como se realiza en playas como El Portil donde se preservan zonas de acopio de arena procedente de dragados.

El proyecto de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2015 contempla inversiones de la Costa para el litoral onubense que superan los 1,7 millones de euros. De esta cantidad, 700.000 euros están destinados para el control de la regresión de la costa -Ayamonte y Matalascalas dentro de la estrategia de protección del litoral onubense-, los 250.000 euros para dotaciones de acceso y uso público de la costa, los casi 211.000 euros para obras de reposición y conservación de las playas o los 300.00 para estudios técnicos del litoral.

En septiembre del año pasado, el director general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, Pablo Saavedra, presentó en Huelva, junto a la delegada de la costa de la provincia, Carmen Crespo, la estrategia para la protección de la costa onubense que, por primera vez estudia todo su frente costero con el objetivo de solucionar todo su frente costero para solucionar sus problemas de erosión, apartando diversas alternativas de alcance.

Los estudios señalaron como zonas prioritarias de actuación las playas de Matalascañas e Isla Canela, encontrándose en su segundo nivel las actuaciones en Isla Cristina, La Antilla, El Portil y Mazagón, según la Subdelegación.