El Ayuntamiento de Linares de la Sierra celebra hoy un pleno extraordinario para iniciar los trámites de su salida de la Mancomunidad de Servicios de la provincia de Huelva (MAS) y de su empresa instrumental, Giahsa. Una historia que viene de lejos y en la que el incumplimiento de MAS del pago del canon del agua de 2013 ha sido la gota que ha colmado el vaso.

La sesión plenaria servirá también para comenzar el trabajo de recuperación de la gestión del agua y de los residuos sólidos urbanos por parte del Ayuntamiento. Incluso se lleva a Pleno (5 concejales independientes del PILS y 2 PSOE) analizar la actual situación de Linares en la Mancomunidad Ribera del Huelva, historia que tampoco es nueva.

El Consistorio ha intentado varias veces recibir de MAS los algo más de 39.000 euros que le corresponden del pasado año por el canon del agua anual a Linares. Giahsa, según el Ayuntamiento, no ha respondido a estos requerimientos amistosos, por lo que ahora habría que sumar un recargo de unos 7.000 euros, más 1.000 de intereses, con lo cual el pago a recibir ascendería en estos momentos a casi 48.000 euros.

De este 2014, apuntan las fuentes municipales, tampoco se ha cobrado nada pero porque Giahsa realiza el pago a finales de año. Por eso solo se pide la deuda de 2013.

En esta línea, el Ayuntamiento de Linares de la Sierra ha realizado un expediente de embargo de cuentas a Giahsa por el incumplimiento del canon. Según los estatutos de MAS, la mancomunidad tiene seis meses para aprobar la salida de sus servicios de un Ayuntamiento.

Linares aprobará hoy, seguramente, debido a la mayoría absoluta del equipo de gobierno independiente, la salida de Giahsa. Según la reciente Reforma Local del Gobierno central hay un mes desde la aprobación de la salida para cumplir mediante una memoria sobre aspectos sociales, técnicos y financieros dos requisitos: que el Ayuntamiento de Linares de la Sierra está capacitado para llevar por sí solo, y siempre municipal (ya que la moción que se lleva hoy a pleno prohíbe una hipotética cesión a empresa privada o subcontratas) el servicio del agua y la basura, como venía haciendo hasta la aparición de Giahsa; y segundo, demostrar que los precios serían más baratos que a día de hoy con Giahsa, tarea a priori no muy difícil según los representantes municipales.

Una de las posibles trabas, apuntan, es que dichas memorias tendrán que ser acreditadas por la Diputación (gobernada por el PSOE y fuerza mayoritaria en Giahsa), y que bajo esa premisa no estará, probablemente, muy por la labor.

El Ayuntamiento puede dejar a Giahsa en cualquier momento durante el proceso que se abre a partir de mañana, pero la intención no es irse a las bravas, aseguran desde el equipo de gobierno linarense. Sería la última opción, dicen, y no se contempla sino realizar todo de forma legal y con los plazos burocráticos establecidos por las partes competentes.