El proyecto provincial de la Mancomunidad de Aguas y Servicios (MAS) y su empresa instrumental, Giahsa, que pasa por la suscripción de un préstamo, por valor de 85 millones de euros a un 11,85% de interés, con un fondo de inversión, podría tener nuevos contratiempos que se sumen al reciente abandono de Gibraleón.

En esta ocasión es Punta Umbría quien amaga con poner piedras a la operación y más concretamente la oposición, que encarna José Carlos Hernández Cansino (PP), quien ha anunciado que presentará un contencioso administrativo a la par que reclamará la adopción de medidas cautelares para frenar una hipoteca de las redes demaniales que, a su juicio, conllevaría "enormes perjuicios para los ciudadanos" del núcleo costero.

La propuesta municipal, que se debate hoy en la Cámara local, saldrá adelante gracias a la mayoría absoluta de la que goza el alcalde socialista, Gonzalo Rodríguez Nevado, quien a su vez es presidente de MAS y, por consiguiente, principal valedor de un acuerdo que conllevará que los 65 municipios adheridos a la institución pública reciban 43 millones de euros tras capitalizar la concesión demanial de las redes.

Entre tanto, el líder popular enarbola numerosos preceptos legales que, a su juicio, evidencian que no se puede llevar a efecto una hipoteca de las mismas infraestructuras que ya fueron cedidas a Giahsa. Más allá de las dudas legales e incluso "inconstitucionales", Cansino subraya que el acuerdo conllevaría que una institución provincial se ponga "al servicio de un representante nombrado por el fondo de inversión y al que se le atribuyen poderes de veto" que constreñirán cualquier movimiento. Añade que "será el hombre de negro quien fiscalizará la gestión en pos de priorizar las garantías de cobro de los prestamistas".

En paralelo, destaca que el acuerdo conlleva "un incremento de las tarifas (el primer año financiada por los propios ayuntamientos) que se verá atenuado en 2015, coincidiendo con las elecciones, pero que continuará el resto de años".

El edil recuerda que el municipio se está viendo inmerso en un asfixiante incremento de la presión fiscal, como en el Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI) y al que ahora se le sumara el de las tarifas de Giahsa, cargando así el peso de la financiación municipal en dos elementos consustanciales al estado del bienestar: vivienda y agua.

Este periódico ha tratado, sin éxito, de contactar con el alcalde puntaumbreño, si bien desde el PSOE se recuerda que Hernández Cansino ejerce como asesor de Aqualia, por lo que "puede ser que se encuentre influido por otros intereses ajenos al de los ciudadanos". Con independencia de ello, algunos dirigentes socialistas insisten en que la MAS es un proyecto suscrito por cuatro fuerzas políticas como (PSOE, PP, IU y PA) y que todos deben "cumplir con rigor y lealtad".

Estas mismas fuentes insisten en que no se puede criticar la dirección o gestión de Giahsa, en la que están involucrado los populares, cuando a través de MAS cobran parte de esos 650.000 euros anuales que se reparten los grupos políticos; amén de contar con una de las cuatro vicepresidencias que ostenta el alcalde de Aljaraque, David Toscano.