Bajo el lema Por la escuela pública de todos y para todos, medio centenar de personas, entre profesores, padres y alumnos del IES Rafael Reyes de Cartaya, a los que se sumaron representantes de otros centros educativos del municipio, mantienen desde el pasado martes un encierro de tres días en el gimnasio de dicho instituto, donde incluso pasan la noche, en defensa de la educación pública y "contra la agresión y los recortes que ésta viene sufriendo por parte del Gobierno central y del autonómico".

Tanto al encierro, como al resto de actividades reivindicativas que de forma paralela se están desarrollando estos días en el centro, han sido invitados a sumarse, según la portavoz de los encerrados, María Dolores Pérez, todos aquellos miembros de la comunidad educativa de Cartaya y de los pueblos circundantes que deseen luchar "por una enseñanza pública de calidad, y porque habrá menos atención para los que más lo necesitan".

De esta forma se están celebrando por las tardes, "ya que los horarios de clase se están respetando y llevando a cabo con absoluta normalidad" según subrayó Pérez, distintas asambleas informativas, debates, convivencias, clases de apoyo voluntarias para los alumnos encerrados de cara a preparar la selectividad y los exámenes de fin de curso, vídeo-forums sobre la crisis, o talleres de confección de pancartas, panfletos y carteles, que culminarán hoy con una marcha desde el centro y una gran concentración final en la plaza Redonda de Cartaya entre las 20.00 y las 21.00 horas.

Otros de los argumentos esgrimidos por los encerrados para llevar a cabo estas acciones son la defensa de los derechos de los alumnos protestando contra el aumento del número de éstos por clase, las sustituciones de los profesores de baja, y el encarecimiento de las matrículas universitarias y la limitación del número de becas; así como en defensa de los derechos de los profesores protestando contra el aumento de horas lectivas, la carga de trabajo y las reducciones salariales, así como contra la paralización de las convocatorias de oposiciones.

En definitiva, según puntualiza Pérez "porque no somos responsables de la crisis, sino víctimas".

Por otra parte, el profesorado de los centros educativos de Isla Cristina ha decidido anular la fiesta de fin de curso que se organiza tradicionalmente por la tarde antes de las vacaciones estivales, y en la que participan los alumnos con coreografías y canciones.

Una decisión que llega como rechazo a las medidas que está tomando el gobierno central en Educación y que les afecta de manera muy directa.

Así lo han hecho saber a los padres a través de un comunicado entregado en mano en el que manifiestan que "estamos sufriendo continuos ataques por parte de la administración educativa, pues los recortes no sólo afectan al sueldo sino disminución de recursos humanos y materiales en relación con el número del alumnado, ya que las sustituciones ya se efectuarán a partir del décimo día de falta".

En la nota se destacan las varias actividades extraescolares que los profesores realizan fuera del horario regular sin cobrar por ello más de lo habitual. "Somos un colectivo de trabajadores que amamos nuestra profesión y por ello participamos voluntariamente en tareas que no son reconocidas ni social ni económicamente por la Administración", dice el comunicado.

Los profesores han pedido el apoyo de las AMPAS y los familiares de los alumnos para que les respalde próximamente una concentración de la comunidad educativa.