Marina Esuri, el mayor puerto deportivo con uso para España y Portugal, está concebido como un complemento turístico para la franja más occidental de la costa onubense. Un equipo de profesionales trabaja desde hace unos años en este proyecto que pretende convertir la zona en un lugar de invernada de los tráficos que vengan atravesando el Atlántico o de aquéllos que desde Portugal se dirijan al Mediterráneo.

La Consejería de Obras Públicas ha aprobado el estudio de viabilidad del proyecto, que incluye 1.400 puntos de atraque y supondrá una inversión de 40 millones de euros, y ha acordado la redacción del anteproyecto del puerto deportivo, que estará ubicado en el término municipal de Ayamonte, con el río Guadiana como base de los puntos de atraque.

Marina Esuri dará cobertura tanto a los usuarios andaluces como el sur de Portugal, con servicios complementarios como 15.000 metros de zonas comerciales. Además dispondrá de servicios portuarios en tierra firma con talleres y varadero. Situado en aguas interiores, a 5 kilómetros de la bocana del Guadiana, el proyecto contempla la conversión para usos turísticos de parte de las instalaciones de la empresa Acuinova, situada en las inmediaciones del puente internacional.

Aunque el complejo náutico implicará el desmantelamiento de las actuales instalaciones y edificaciones auxiliares de la compañía acuícola destinadas al cultivo de langostinos, el uso piscícola de la zona se mantendrá, pero en vez de una actividad extensiva que ocupa entre 50 y 60 hectáreas se reducirá hasta las 3 o 4 hectáreas. De esta forma, el cultivo será intensivo y no extensivo, cambio que ha motivado la celebración de varias reuniones con la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía.

La extensión de la marina es menor a la que se había proyectado inicialmente y su construcción contempla la regeneración de la marisma hasta el arroyo Pedraza, que deberá recuperar como marisma original. Para los pescadores portugueses supondrá la posibilidad de que se drague la ría, algo que vienen reivindicando desde hace años.

El proyecto conserva algunas características del que ya se propuso en 2006 y, aunque aún queda por definir con precisión las obras e instalaciones necesarias, sí están establecidas las directrices básicas que van a orientar su diseño.

Así, la bocana de salida de la marina al cauce del Guadiana tendrá una configuración muy similar a la idea planteada en el anterior plan. De cualquier forma, según el proyecto, el diseño en planta del puerto "tenderá a minimizar la ocupación de espacios de dominio público y, asimismo, una nula proyección de sus obras de contorno por fuera de los límites laterales prefijados en el diseño de hace cuatro años".

La accesibilidad a las instalaciones náutico-deportivas se garantiza mediante las infraestructuras viarias existentes que conectan la A-49 con el complejo turístico Costa Esuri y "la capacidad del puerto será suficiente para adecuarse a la demanda potencial de puestos que presenta la zona y para hacer económicamente factible su explotación". En estas condiciones, se estima como límite inferior recomendable una capacidad de 1.300 puestos de amarre a flote permanentes.

Los usos de la zona terrestre del puerto dan prioridad entre ellos a los que se orienten al servicio de la actividad náutica y marina y a los que fomenten el desarrollo de actividades paralelas.

El diseño delimita una parcela para la implantación de la nueva piscifactoría, que sumada al complejo hotelero, spa e instalaciones deportivas, "rentabilizarán la proximidad de la planta de cogeneración existente, productora de energía eléctrica y fuente térmica". Los promotores afirman que así se mantendrá la actividad y el empleo y se mejorará la viabilidad económica de la actuación portuaria.

El proyecto determina igualmente que las obras e instalaciones previstas se realicen procurando una máxima compatibilidad con las cualidades medioambientales de la zona. En especial, en el diseño de los muelles y explanadas se procurará un mínimo empleo de materiales y la reducción al máximo de su desarrollo en altura. Asimismo, se procurará una máxima integración de las obras y las fachadas visuales con los bordes adyacentes.