El pistoletazo de salida de los actos que el Ayuntamiento de Minas de Riotinto ha preparado para las próximas Navidades tuvo lugar con la presentación de un libro, del Hijo Predilecto, Fernando Durán García, titulado Recuerdo de Lugares y Sucesos Acontecidos en Minas de Riotinto.

Mucho se ha escrito y hablado de la historia de Minas de Río Tinto, tanto en su aspecto laboral, social, deportivo y cultural, pero para elaborar un libro como lo ha hecho Fernando Duran, hacen falta datos, vivencias, experiencias, memoria, imaginación, tesón, paciencia… y amor, sí, amor, querer mucho y de manera desprendida a su pueblo, como él hace diariamente. Es un libro del pueblo para el pueblo.

Duran, comentó que al jubilarse en el año 1994 con 55 años, "me planteé que era joven todavía para estar inactivo y pensé construir una gran maqueta del antiguo pueblo de Minas de Riotinto, que desde principios del siglo XX fue paulatinamente sepultado por las excavaciones mineras". Pues bien, la idea de que se perdiera para siempre, la memoria del antiguo pueblo de Río Tinto, despertó en el inquieto artista, la idea de construir una enorme maqueta de Río Tinto Pueblo, su pueblo, para perpetuar de alguna manera los rincones y vericuetos por donde transcurrió, posteriormente, su niñez. En ésta empleó más de 6 años con unas 4.000 horas de engorroso y minucioso trabajo. No satisfecho, empezó a confeccionar carrozas para la Cabalgata de Reyes Magos en el año 1974 hasta hoy, siendo presidente de la asociación desde el año 1988.

En la presentación de Recuerdo de Lugares y Sucesos Acontecidos en Minas de Riotinto, indicó que hace unos años, en dos foros de opinión: Riotinto Digital y Minas de Riotinto Libre, creados por sus administradores, para opinar sobre nuestro pueblo, y recordando la figura de un personaje popular, protagonista de curiosas vivencias, "se me ocurrió darle vida relatando hechos populares protagonizados por el personaje, que le llamábamos Tío Potaje (años 1940-1950). Para no entrar en discusiones que desvirtuaran mi objetivo, (cosa inevitable en los foros en internet), me di de alta con el seudónimo de Tiopotaje, (para no ser descubierto), y así despertar el interés de los foreros en su lectura".

Se dedicó a "revivir el personaje" durante un largo período de tiempo, escribiendo historias y hechos reales, vividos por éste, "sin dar a conocer mi identidad, para que la fuerza de Tío Potaje, despertara, como digo, un interés, como así ocurrió, de tal manera que los foros se convirtieron en una tertulia llena de relatos de verdadero valor histórico, ya que los foreros más habituales, al leer mis relatos, (los de Tiopotaje), se interesaron por ellos, participando en algunos casos, con otras historias, enriqueciendo el contenido de ambos foros".

El autor, ha recopilado todas estas historias escritas en los distintos foros y les ha dado forma, completándolas con algunas otras recuperadas de su padre, recogiendo en algunos casos, las intervenciones de algunos foreros, que por su interés y conocimientos de la historia de nuestro pueblo, han enriquecido el contenido del libro, logrando un ambiente distendido en el que el lector, en algunos casos se reconocerá como "protagonista también de algún suceso y/o anécdota" y en otros casos como componente de una tertulia, hoy día, tan poco habitual.

Al final del libro, el autor relaciona los nombres con el seudónimo de cada forero, logrando Duran, una obra poco usual, y por ello, muy interesante, porque aparte de una excelente recopilación de acontecimientos y sucesos reales, ofrece su lectura, un estudio psicológico de cada participante en esta improvisada tertulia internautita, moderada sabiamente por la pluma de Tío Potaje. Hasta la presentación del libro, muchos de los que participaron en los foros no conocieron la verdadera identidad del autor de los relatos…y del libro.

El lector disfrutará con las vivencias, contadas con una frescura que reviven al personaje Tiopotaje: Mi cueva, Las matanzas, La Pocita, Los entierros, Ernestito, Los niños de los piñones, Cualquier día en la fuente de La Mina, El Garabancho y otros, dan una idea del valor antropológico de esta exquisita obra.

Durán dedica el libro; "a todos los foreros que intervinieron en el apartado de Tiopotaje, dándoles mis más expresivas gracias por su buena acogida y colaboración en comentarios que han enriquecido la narración de estos episodios".