El artista sevillano Fernando Parrilla muestra su Abstracción Barroca II en el Centro de Arte Moderno y Contemporáneo Daniel Vázquez Díaz de Nerva durante estos días sorprendiendo a propios y extraños con su pintura de los instintos, como la define el escritor José Antonio Illanes.

Para el literato sevillano, que define el arte de Parrilla como "el de quien ha crecido libremente en el universo de los instintos", el pintor posee el arte de equilibrar los instintos, de contenerlos, dosificarlos, administrarlos sabiamente en cada lienzo. "Es un pintor de intuiciones, cabría decir que de clarividencias, que se mueve en el lienzo por impulsos íntimos y estímulos impredecibles, sin juicios previos ni reflexiones teóricas Para él la pintura es una propensión natural, indeliberada, pero siempre en armonía con la belleza y el equilibrio", aseguró.

Illanes ve en Parrilla un veterano cazador de espíritus y en cada cuadro suyo una trampa para capturar almas. "Cada cuadro de Parrilla es tan distinto como cada ser que lo contempla y tan igual como la especie humana. Una vez perdidos en ese denso follaje de colores y formas, cada cual halla lo que quiere hallar, busca lo que quiere buscar. Sus cuadros poseen la virtud de adaptarse al corazón como un guante de seda, transmitiendo sensaciones desiguales conforme se contemplan, trastornando la percepción, obligando al alma y los sentidos a absorber lo que instintiva y puntualmente sienta, atesorando apreciaciones diversas para momentos emotivos distintos", afirma.

Parrilla lleva 40 años exponiendo. Comenzó en La Caixa. Después trabajó en Madrid con Juan Aizpuru, mostrando su obra en la Selección Lóreal en el Centro Conde Duque. Allí conoció a Luis Gordillo con el que hizo un curso de grabado, junto a Mitso Miura. Expuso con Tapies, Chillida, Jaume Plensa, Carmen Laffón y un largo etcétera en el homenaje a las víctimas del franquismo y los luchadores por la libertad. Ganó el concurso para ilustrar la agenda oficial de Expo 92 y volvió a colaborar con Manuel Salinas y Luis Gordillo en la Caravana de Colores en el Museo de Écija, RTVA de Sevilla y Almería, y Oporto. Después, fue a Londres para exponer en la galería Camden, y seguidamente a Berlín. Para entonces ya había expuesto como finalista de Lóreal en el Pompidou y en Nimes.

La Universidad de Sevilla le invitó a participar en Arte en Obras con Luis Gordillo, Abraham Lacalle y Miki Leal. Volvió a invitarle a una colectiva con Carmen Laffón, Juan Suárez y Guillermo Pérez-Villalta, entre otros. Después expuso en Moscow Art Spirit.