El presidente de la Diputación de Huelva, Ignacio Caraballo, y el delegado de la Junta de Andalucía en Huelva, José Fiscal, coincidieron ayer en que ambas administraciones trabajarán para que el complejo industrial onubense que Ence va a transformar en un centro de generación de energía renovable, tras el cierre de la celulosa, "beneficie lo máximo" a la provincia.

Preguntado por las declaraciones realizadas por el consejero delegado de Ence, Ignacio Colmenares, en el portal www.eleconomista.es, donde éste indicó que "gracias al cierre de Huelva y al recorte de costes, en noviembre y diciembre vamos a volver al beneficio neto", Caraballo señaló que el cierre de la celulosa era "irreversible" y entiende que la empresa "tiene que seguir invirtiendo, mejorando y trabajando por esta provincia".

"En este camino nos tenemos que encontrar porque hay etapas que se cierran y otras que se abren y tenemos que seguir trabajando con ellos", enfatizó el presidente de la institución provincial. Del mismo modo, insistió en que "Huelva tiene una base importante en la industria con puestos de trabajo estables y con capacidad económica".

Por su parte, el delegado de la Junta en Huelva, José Fiscal, señaló respecto al nuevo proyecto de Ence que la Administración "actuará como actúa con cualquier otra empresa. Los permisos que soliciten se estudiarán y si cumplen los requisitos se otorgarán".

"Nosotros estamos muy interesados en que esta nueva actividad sea la máxima posible para mantener los máximos puestos de trabajo", remarcó Fiscal, quien precisó que, aunque el cierre de la celulosa "venía de lejos, está motivado por la reforma del sector energético y la laboral" y entiende que "si se hubiera hecho un esfuerzo y una inversión podría haber sido rentable".