A pesar que el nivel de ventas de la provincia onubense en temporada de rebajas ya fue bajo en 2013, este año ha bajado otro escalón. Ni terceras rebajas, promociones 2x1 o descuentos del 70% han conseguido aumentar la cifra de facturación de la campaña pasada, obteniendo este año una suma de 12,15 millones de euros frente a los modestos 12,40 millones de la campaña anterior, según los datos que ha publicado la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía (CECA).

A pesar de la caída del 2% de las ventas en rebajas de la comunidad autónoma andaluza, el descenso ha sido más suave si lo comparamos con la disminución del 9% del verano anterior.

"El comercio tenía la expectativa de tener una campaña de rebajas aceptable, pero este optimismo no se ha visto reflejado en el balance final de la campaña, ya que las ventas en los establecimientos comerciales, en el mejor de los casos -en torno al 40%-, han sido sólo similares respecto al mismo período del año anterior", explicó el presidente de la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía, Manuel García-Izquierdo Parralo.

Las previsiones para la campaña estival en Andalucía eran superar los 200 millones de euros; sin embargo, ha rebasado por poco los 190 millones. Por provincias, según los datos obtenidos, en primer lugar, y con la cifra de facturación más alta, 42,20 millones de euros, está Sevilla, seguida de Málaga, con 35,37 millones; en tercer lugar, la provincia de Cádiz, con un total de 27,44 millones de euros. Granada ha obtenido 20,29 millones, seguida de cerca por Córdoba, con 20,11 millones de euros, y la provincia de Jaén, con 17,02 millones. Almería suma 15,97 millones, y, por último, la provincia onubense, con 12,15 millones de euros.

En Huelva, las esperanzadoras previsiones de la CECA tampoco se han cumplido. Los 12,50 millones de euros de facturación que se auguraron a principio de la temporada de rebajas de verano, se han quedado en 12,15 millones de euros, siendo la colista de la estadística andaluza.

"Aunque la sensación de los comerciantes es que lo peor de la crisis ya ha pasado, de ahí el optimismo que mostraron ante estas rebajas, lo cierto es que la demanda sigue siendo aún muy débil. Los datos macroeconómicos aún no se reflejan en la economía real de las familias. Si a ello le sumamos la desaparición de los periodos tradicionales de estas campañas especiales de ventas, encontramos las razones por las que éstas no mejoran sus datos de facturación", añadió la CECA en un comunicado.

La Confederación concluye afirmando que "en un intento por evitar perder el espíritu de las rebajas, y a pesar de la liberalización existente para establecer libremente cada establecimiento cuándo hace las campañas de descuentos, la mayoría del comercio de proximidad continúa manteniendo las fechas tradicionales de inicio y finalización de las rebajas de verano".